Le llega la hora de la verdad al San Antonio -Pabellón Eugen-Haas-Halle, 15.00-. Mermado su potencial deportivo en las últimas temporadas para competir a nivel estatal, los albiazules confían la temporada a la opción de llevarse la Recopa, lo que sería un logro importantísimo para la capacidad competitiva actual de la escuadra navarra.

Pero enfrente va a tener a uno de los equipos más laureados del viejo continente en lo que se considera una final anticipada. El Gummersbach es el último campeón de la Copa EHF, ha logrado el torneo que hoy se pondrá en liza en dos ocasiones a finales de los años setenta y ha sido nada menos que cinco veces campeón de Europa.

De aquella grandeza -también acumula 12 Bundesligas- ahora queda bien poco, pues casi todos esos títulos se cosecharon en los años ochenta y noventa. En el camino de tanto galardón, los germanos ya dejaron en la cuneta a otra escuadra vasca, el Bidasoa, en la edición de la EHF de 2006.

Así pues, la eliminatoria va a enfrentar a dos conjuntos con trayectorias muy similares, que buscan salvar la temporada con un torneo europeo menor, pero que satisfaría los objetivos marcados en su inicio. Puede ser también una de las últimas oportunidades en las que los antonianos puedan optar a un título continental, a la vista del severo recorte económico que va a sufrir el presupuesto del club para el próximo año.

Son todos ellos ingredientes que añaden mayor trascendencia a lo que va a haber en juego en esta semifinal de la Recopa, cuyo vencedor se antoja que será el futuro campeón del torneo a la vista del nivel de los otros dos equipos en liza.

Salir vivos

Sin renunciar a nada en su visita a la pista alemana, lo que está claro es que el objetivo primordial de los dirigidos por Chechu Villaldea es conseguir un resultado que les mantenga con opciones de cara al choque de vuelta en el Universitario, aprovechando así el factor cancha para eliminar a los teutones.

Desde luego que ello no va a ser tarea nada fácil, pues el Gummersbach cuenta con jugadores de reconocida calidad, desde su portero Stojanovic hasta el central Szilagyi, pasando por los internacionales croatas Vukovic y Zrnic. Otra de las particularidades del rival antoniano es su presionante defensa, con variantes 4-2 y 3-3.

La baza navarra, tratar de prolongar la línea ascendente de los últimos encuentros y mantener la condición de invictos que hasta ahora tienen los de Villaldea en la competición europea. De lograr ambas premisas, el San Antonio tendrá opciones de estar en la final.