Mucha gente tiene la habilidad de estudiar la víspera del examen y aprobar. Hay estudiantes que hacen de este esfuerzo de última hora un arte, y aunque invariablemente se prometen que la próxima vez llevarán la materia al día y sin tantos agobios, caen indefectiblemente en ese pánico del último minuto que los fuerza a situarse en ese límite del bien y del mal que los empuja a tener que arreglárselas con un esfuerzo de última hora.

En esas se encuentran cuatro equipos a tres jornadas de terminar la temporada regular de la Liga ACB: Gran Canaria, Bizkaia Bilbao Basket, DKV Joventut y Granada. Podría decirse que Estudiantes y Unicaja tampoco han hecho del todo los deberes, pero sus 16 victorias, por los 15 de los canarios y los 14 de los restantes equipos, ubican a malagueños y madrileños en situación de ventaja: los de Aíto reciben a Valladolid y Baskonia respectivamente y visitan Granada; mientras, Estudiantes viaja a Barakaldo, jugará en casa frente al Alicante y cerrará la liga en Santiago. Lo tienen demasiado fácil, salvo que se les ocurra dormirse.

Bizkaia Bilbao Basket no lo tiene tan mal como hace unas semanas. Tras una campaña llena de sobresaltos, los de Katsikaris están en su mejor momento. Ganar en Badalona los involucró por completo en la pelea por la octava plaza. Y es que con diez victorias en esta segunda vuelta, la escuadra vizcaina ha vivido una resurrección impensable hace dos meses, cuando aún ocupaba plaza de descenso. A este respecto, Alex Mumbrú, MVP de la última jornada liguera, trata de poner esperanza y mesura entre los aficionados. «El play off está complicado pero mientras tengamos posibilidades vamos a luchar por ello. Hemos de pensar partido a partido y en Badalona nos hemos ganado seguir teniendo posibilidades».

Deben jugar cuatro partidos en lugar de tres, debido al parón por la fase final de la Eurocup. Tres de ellos serán en el BEC -Estudiantes este domingo, Gran Canaria el 4 de mayo y Valladolid en la última jornada- y uno fuera -mañana, en el Palau Blaugrana a las 20.45, su choque 50 de la temporada, contra un Barcelona que adelanta la jornada 33 porque acude a la Final Four de la Euroliga el 9 de mayo-, con lo que los hombres de negro aspiran a plantarse con 17 victorias, ya que salvo el duelo del Palau, todos los demás son asequibles.

El peor rival, el Gran Canaria

A día de hoy, Gran Canaria marca el límite de los puestos de play off y es el enemigo a batir por los hombres de negro. Los canarios, con el mismo número de partidos disputados, tienen una victoria más que los bilbainos y además, cuentan en su haber con el 98-78 que les endosaron en «la roca»; es decir, que será casi imposible ganarles el average. Pero los de Pedro Martínez tienen un calendario muy difícil. Aparte del choque del BEC, los canarios juegan dos partidos fuera -Obradoiro y Cajasol- y uno en casa -Valencia Basket-.

Hay otros dos equipos implicados en la lucha por el play off, pero con menos posibilidades: Granada y Joventut, con las mismas victorias pero un partido más disputado. Los de Pepu Hernández deberán exprimir sus opciones al máximo, porque son quienes peor lo tienen. Tienen el average perdido respecto a los hombres de negro, Gran Canaria y el Granada, y además acabará la liga en la Fonteta contra Valencia Basket, después de visitar Alicante y recibir a un Xacobeo Blu:Sens que se presume ya estará descendido para entonces. No conviene fiarse, pero se puede decir que la Penya tiró la temporada por la borda en el partido del pasado domingo frente a Bilbao Basket.

Por su parte, el Granada se halla con la opción de jugar la postemporada por primera vez en su vida. Visitan Donostia este domingo y recibirán a Unicaja en la penúltima jornada, para terminar la liga en la cancha del colista Murcia; es decir, que su único rival de casa es el más complicado. En cuanto a average, lo tienen perdido con Bilbao Basket -perdieron ambos partidos- y ante Gran Canaria -una ajustada victoria y una derrota por paliza-, y ganado frente al DKV Joventut. El técnico nazarí, Trifón Poch, consciente de sus pocas posibilidades reales, arenga a su afición. «Ahora mismo el equipo se siente muy capaz de competir contra cualquier rival, y vamos a ir a apurar al máximo, a muerte, todas las opciones que tengamos».

Cuatro candidatos se citan para una plaza en el límite del bien y del mal.