Ezker Batua fue la única formación que salió ayer a la palestra para criticar las declaraciones de la presidenta del Parlamento de Gasteiz, Arantza Quiroga, que acusó a las víctimas del franquismo de tener odio.

El coordinador general de la formación, Mikel Arana, pidió a Quiroga que reciba a las víctimas del franquismo para que conozca «de primera mano su realidad» y criticó las afirmaciones realizadas por ésta en relación a los apoyos que está recibiendo el juez Garzón.

La presidenta del Parlamento de Gasteiz aseguró que «a algunos se les está yendo la mano con las manifestaciones de apoyo a Garzón y están tratando de sacar sus traumas personales»; «todo el odio y el rencor que llevan dentro», añadió.

Arana calificó las manifestaciones de Quiroga de «desafortunadas, ofensivas y dolorosas», sobre todo al tratarse de unas palabras pronunciadas por «la máxima representante del Legislativo» de la CAV. Por ello, emplazó a Quiroga a que «escuche» las explicaciones de las víctimas del franquismo para que «entienda cómo se sienten tras la imputación al juez Garzón de un delito de prevaricación por intentar investigar las desapariciones durante la guerra civil y la dictadura». Asimismo, anunció que, en el caso de que Quiroga no reciba a las víctimas del franquismo, será su partido el que solicite la comparecencia parlamentaria de éstas.

El coordinador de la Ejecutiva del PSE, Mikel Torres, también se refirió a Quiroga en una entrevista en «Radio Euskadi». Torres tan sólo criticó que se ha «excedido» en sus funciones y destacó que «no es la primera vez que se excede en algunas cosas que no le competen». «No debería hacer determinadas declaraciones políticas que no van en su cargo», agregó.