No parece el Nástic el rival más asequible, pero el Real Unión no está para esas menudencias. A los irundarras les importan bastante más los puntos que el nombre de los rivales y piensan en enlazar una segundo triunfo consecutivo que revitalice sus opciones de permanencia.

Lo que sería «un empujón muy importante», si no definitivo, tal y como reconocía Iñaki Alonso. La fórmula para conseguirlo pasa por demostrar «quién se la está jugando desde el principio». También por mantener «la dinámica» de las últimas jornadas, en las que el Real Unión se está mostrando como «un bloque muy sólido» y, además, con «opciones de marcar goles».

Alonso, por último, confía en que su equipo no se deje llevar por la presión de los resultados, al disputar el último choque de la jornada. «Más ansiedad y más presión no vamos a tener. Y además puede ser positivo».