Una veintena de antitaurinos se concentraron ayer frente a los juzgados de Iruñea, mientras el representante de Equanimal en el Estado, Eladio Ferreira, recurría la sentencia de 601 euros de multa que la Policía Municipal impuso a los ocho miembros de esta plataforma por tratar de encadenarse dentro del recorrido del encierro para protestar contra el maltrato animal y en favor de la abolición de la tauromaquia.

El día 12 de julio de 2008, los ocho activistas (seis mujeres y dos hombres) saltaron a la cuesta de Santo Domingo con pancartas y camisetas reivindicativas poco antes de que los corredores entonaran la tradicional canción ante la figura de San Fermín en la hornacina. La Policía Municipal, encargada de la vigilancia durante la carrera, se los llevó a comisaría, donde los retuvo durante una hora. En realidad, la protesta apenas duró unos segundos y fue captada por las cámaras de televisión que retransmitían el acto. Las seis chicas y los dos jóvenes sólo llegaron a sentarse en la calle cuando un grupo de agentes de la Policía Municipal se abalanzó sobre ellos sin miramientos y se los llevó a rastras fuera del recorrido.

Ferreira, que afirmó que ésta es la primera acción en Iruñea pero «no la última», explicó que sus compañeros pretendían «manifestar su oposición a las corridas de toros de los Sanfermines mediante un golpe de efecto mediático, retrasando el inicio del encierro de ese día». El director de la organización defiende su derecho a luchar contra el maltrato animal con acciones de este tipo, que «no tienen ninguna repercusión física para las personas, porque son absolutamente pacíficas». Explicó que han recurrido las multas, ya que no se llegó a alterar el espectáculo y el cohete no se había lanzado aún cuando la Policía les sacó del recorrido.

El Ayuntamiento de Iruñea les acusa de tratar de interrumpir un acto de gran «importancia sociológica» para la ciudad y un elemento esencial de los Sanfermines. Argumentos que, según esta plataforma contra el maltrato animal, carecen de rigor jurídico, ya que presentan los Sanfermines «como algo intocable que no puede cambiar».

Dos asaltos a ruedos y otro, a Cibeles

Equanimal intentó hacer del juicio de ayer una jornada de protesta, pero la lluvia arruinó uno de los actos principales, la comida vegana al aire libre. Por la tarde, celebraron un taller sobre desobediencia civil contra el maltrato animal.

Esta plataforma ha estado presente en protestas antitaurinas, como la convocada en Bilbo el pasado 10 de abril. Fueron los primeros en colarse dentro de la plaza de toros durante una corrida. Fue en Las Ventas, el 4 de mayo de 2008, acción que repitieron en Alicante en junio, reventándole la matanza al torero Fran Ribera. Militantes de Equanimal también boicotearon la Pasarela Cibeles durante un desfile con pieles y han grabado vídeos sobre las condiciones de vida en granjas de cerdos, bisones y pollos.