En la presentación de los resultados de la actividad de 2009 de la Federación Erkide, que agrupa a las cooperativas de Trabajo Asociado, Enseñanza y Crédito, sus máximos responsables, Juan Mari Concha, presidente, y Agustín Mendiola, director, denunciaron que Confebask les ha vetado de los órganos de representación social del nuevo Lanbide, que acogerá las transferencias de las políticas activa de empleo, aunque no vendrá acompañado de las políticas pasivas, es decir, de la financiación económica necesaria para hacer frente a las prestaciones económicas. Esa competencia se quedará en Madrid.

Momentos antes de la denuncia, los responsables cooperativistas explicaron que el año pasado crearon empleo, pero redujeron un 16% su facturación. «Eso se consigue haciendo sacrificios temporales, porque las cooperativas tienen como objetivo estratégico crear empleo», afirmó Agustín Mendiola.

Sin embargo, criticó, acto seguido, que se deje a las cooperativas fuera de los órganos donde se discutirá sobre el empleo. Los responsables de la Federación de Cooperativas Erkide denunciaron que en los estatutos de Lanbide, «que se están tramitando con aceleración inusitada», se ha dejado a las cooperativas fuera de los órganos de representación social, porque «se han repartido los cinco para Confebask y otros cinco para los sindicatos, los dos que se encuentran en la mesa de diálogo social de Gasteiz: CCOO y UGT».

Vía de urgencia

Concha y Mendiola se quejaron de que «no se nos ha informado, porque todo este tema se ha cocinado en la mesa de diálogo social» y «se ha elaborado con urgencia». En la Federación de Cooperativas conocieron el decreto porque «llego al CES Vasco la pasada semana, aunque un día después desapareció». El director de la federación explicó que «es doloroso que se cocine un decreto de esas características por la vía de urgencia, recortando plazos a la mitad y se les olvide contar con nosotros que en este tema creamos empleo y de calidad, lo que no ocurre con todas las empresas mercantiles». Agustín Mendiola tachó de «incomprensible» esa actuación y Juan Mari Concha añadió que «es doloroso el veto de Confebask». Ambos dijeron que no quieren quitar representación a nadie, sino que «nos den un representante para que esté en ese órgano que se va a dedicar a las políticas activas de empleo. De eso, nosotros sabemos mucho», precisó.

El problema del veto no es la primera vez que surje relacionado con Confebask. Y es que la marcha de ELA y LAB del CES Vasco se debió a esa prepotencia de la patronal vasca. Lo que ayer desveló la Federación de Cooperativas Erkide muestra que esa actitud patronal se mantiene en el nuevo proyecto de Lanbide.

La consejera de Empleo y Asuntos Sociales, Gemma Zabaleta, ha manifestado de forma reiterada de la necesidad de la transferencia y ha anunciado que se producirá en 2010, aunque el Servicio Público Estatal de Empleo se encargará de las políticas pasivas, es decir de las prestaciones por desempleo.