El primer temporal de lluvias desde nada menos que enero comienza a remitir, y aunque apenas ha causado problemas, ha habido precipitaciones excepcionales y se han superado los 60 litros por metro cuadrado en 24 horas, como los recogidos en estaciones en Otxandio (90), en Beasain (102) o en Bidania (148). Unas tormentas que, si bien el lunes afectaron más a Gipuzkoa y Nafarroa y el martes a Bizkaia y Araba, ayer volvieron a concentrarse sobre el norte navarro y suelo guipuzcoano. Tanto que una carretera secundaria de Sakana (NA-2410) quedó cortada al tráfico desde las 08.00 por el desbordamiento del río Arakil a la altura de Zamartze.

En el norte del territorio también permanecían ayer varias vías cortadas debido a la nieve. Una nieve que muchos esperan aguante hasta este fin de semana, para disfrutar de ella en pleno mes de mayo. El problema de un posible deshielo rápido no parece contemplarse, ya que no se esperan de nuevo temperaturas `veraniegas' en los próximos días, aunque sí que el viento del norte deje paso el viernes al del oeste y los termómetros se moderen hasta acercarse a los 20º.

A buen seguro que, sobre todo en buena parte de Nafarroa, aguardan impacientes a que el cierzo deje de soplar como lo está haciendo estos días. Un viento que agudizaba la sensación de frío y que causó varias incidencias, una veintena en Nafarroa, en las que tuvieron que intervenir los bomberos.

Unas adversas condiciones meteorológicas que también obligaron a suspender desde el la tarde del lunes el servicio de practicaje en el Puerto de Pasaia y que se reanudó a primera hora de ayer.

Por lo demás, tras estos meses cálidos y secos -extremadamente cálido en abril, por ejemplo, en Iruñerria, con 2-3º por encima de la media-, este agua de mayo, como bien apuntan muchos refranes, será como una bendición para los campos y las cosechas, y un trabajo extra para quienes habían cortado el césped la semana pasada y que verán crecer la hierba más deprisa de lo deseado. Quién sabe, quizá este mayo que se presenta inestable se supere la marca de tormentas del mes, por ejemplo, en Iruñea, con 13 en 1993. Entre tanto, en la capital navarra hoy irán menos encogidos, ya que el termómetro puede llegar a los 13º.