Joaquin Phoenix se ha preocupado de fomentar la imagen de actor misterioso, sobre todo a raíz del anuncio de su retirada que, tal como desvelamos en la sección de noticias Aplausos y Pataleos, ha resultado ser falsa y motivada por un documental autobiográfico realizado por su cuñado Casey Affleck. Entre tanto, todavía nos faltaba para ver su última película de ficción, estrenada en los Estados Unidos hace ya dos años. Puede que nos llegue ahora con retraso debido a que el actor vuelve a estar de actualidad, aunque no quiero pensar, de no ser así, lo que habría pasado con este imprescindible drama romántico dirigido por el gran James Gray.

La importancia de «Two Lovers» reside en que el cineasta neoyorquino cambia de registro en este su cuarto largometraje, tras dirigir los sólidos e intensos thrillers «Cuestión de sangre», «La otra cara del crimen» y «La noche es nuestra». Su nueva película está pensada para ese público que está cansado de las estúpidas comedias románticas de Hollywood y desea disfrutar de un drama romántico verdaderamente adulto y sensible. No cabe duda de que es un género al que James Gray tiene mucho que aportar porque, si algo distingue su estilo fílmico, es un dominio narrativo basado en la cuidada dirección interpretativa y la brillantez de los diálogos.

Por otra parte, el hecho de que Joaquin Phoenix sea su actor predilecto, le predisponía para escribir para él un personaje desequilibrado emocionalmente, dividido entre dos mujeres, las cuales representan respectivamente la fidelidad a sí mismo y la dependencia familiar.

Vinessa Shaw encarna a la novia elegida por su familia para que se convierta en su esposa, siendo la que le da la ternura que necesita. Gwyneth Paltrow es un amor más impulsivo, por cuanto se trata de la chica que no le conviene, una madre soltera que tiene vicios y se apoya económicamente en su jefe, con el que mantiene una relación de interés. El relato arranca con un intento frustrado de suicidio, que sirve para advertir al espectador sobre la inestabilidad del contrariado protagonista y su falta de autoestima.