El Índice de Precios al Consumo (IPC) situó ayer en torno a un punto porcentual la subida de los precios en Hego Euskal Herria en el pasado mes de abril, aupados sobre todo por la escalada en los combustibles. Según los datos difundidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE), los precios aumentaron en abril en mayor medida en Araba (1,4%), que en Gipuzkoa (1,1%) y en Bizkaia y Nafarroa, ambos con un 1%.

En términos interanuales, la tasa de inflación interanual en Nafarroa se sitúa ahora en el 1,1%, mientras que en Bizkaia sube al 1,3%, en Gipuzkoa un 1,2% y en Araba vuelve a llegar hasta el 1,4%.

Los principales elementos inflacionista fueron el de los transportes, empujado por el alza del precio de los combustibles, y el vestido y calzado. De esta forma, en el conjunto de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, Vestido y Calzado (+8,8%) y Transporte (+1,4%) fueron los grupos que más vieron aumentar sus precios en abril, seguidos de Vivienda (+0,7%), Hoteles, cafés y restaurantes (+0,5%), Menaje (+0,4%), Otros (+0,4%), Bebidas alcohólicas y tabaco (+0,2%) y Medicina (+0,1%). El único sector en el que descendieron los precios fue el de Comunicaciones (-0,9%). En Alimentos y bebidas no alcohólicas, Ocio y Cultura y Enseñanza no hubo variación de precios. En Nafarroa, el grupo más inflacionista fue el de Vestido y Calzado (7,1%), seguido de Transporte (1,4), Vivienda (0,9), Hoteles, cafés y restaurantes (0,6), Medicina, Ocio y Cultura y Otros -joyería, cosmética, servicios y seguros- (0,3 cada uno) y Menaje (0,1).

En el apartado de valoraciones, tanto Confebask como el presidente navarro, Miguel Sanz, coincidieron en calificar como positivo el dato de la inflación. La patronal de la CAV saludó que la subida en torno a un punto porcentual permite que la tasa de inflación «se mantenga en niveles moderados y similares a los existentes en la zona euro». Sanz, por su parte, lo consideró «un buen elemento para poder integrarlo dentro de los parámetros económicos, como el crecimiento del primer trimestre del 2010 del 0,4%» frente al 0,1% del Estado.

Los sindicatos, por su parte, expresaron su preocupación porque se garantice el poder adquisitivo de los salarios.