Desde el lunes pasado continúa la ocupación de un caserío expropiado por el proyecto del TAV en el barrio zornotzarra de Leginetxe, ya que en el lugar se va a construir un viaducto. Por cuarta jornada consecutiva, a pesar del control policial y de las amenazas de ser desalojados y detenidos, varios vecinos que se oponen a la alta velocidad ferroviaria permanecían en el interior del baserri, recibiendo el apoyo de la ciudadanía.