Al menos 158 personas murieron y ocho lograron sobrevivir al estrellarse ayer un avión de la compañía de bajo coste Air India Express, procedente de Dubai, al tratar de aterrizar en Mangalore, suroeste de India).

El Boeing 737 de Air India Express, filial de la compañía pública Air India, con 160 pasajeros y seis tripulantes a bordo, aterrizó y nada más hacerlo se salió de la pista para ir a chocar contra un muro de sacos de arena, antes de virar y golpear con una de sus alas, que perdió, contra la estructura de un «localizador», y precipitarse 200 ó 300 metros por un barranco cubierto de vegetación, donde minutos después fue pasto de las llamas.

Esos minutos y el hecho de que el fuego se extendiera de forma gradual salvaron, según Efe, la vida de ocho personas que lograron salir por una gran grieta abierta en el fuselaje, en la mayor catástrofe de la aviación civil en India desde 1996, cuando un avión de Kazajstán entró en colisión en vuelo con un avión saudí, cerca de Delhi, causando 349 muertos.

El ministro indio de Aviación Civil, Praful Patel, informó de que tres de los supervivientes se encuentran muy graves, cuatro están levemente heridos y uno de ellos salió ileso. Un niño que fue rescatado con vida del avión murió en el camino al hospital.

«Según las primeras informaciones, el avión tocó tierra, pero no logró mantener el control en la pista de aterrizaje», añadió.

Según Air India, los 160 pasajeros eran de nacionalidad india, y entre ellos había 19 niños y cuatro bebés. La tripulación estaba comandada por un piloto británico de origen serbio que llevaba dos años trabajando para la compañía. Patel destacó su experiencia, con más de 10.000 horas de vuelo y familiarizado con esa pista de aterrizaje. Las condiciones meteorológicas eran buenas, con suficiente visibilidad, pero el ministro destacó que la zona de seguridad alrededor de la pista en caso de pérdida de control es más corta que en otros aeropuertos.

En cualquier caso, las cajas negras del avión fueron recuperadas y arrojarán luz sobre las causas del siniestro.

Uno de los supervivientes, Uner Faruq, que fue entrevistado por NDTV en su cama del hospital, dijo que escuchó un ruido sordo cuando el aparato tocó tierra. «El avión se desvió luego de su ruta, fue derecho hacia los árboles y el humo se extendió dentro de la cabina. Yo me enredé en los cables, pero logré salir», afirmó.

«No hubo aviso de problema alguno a los pasajeros y parecía un aterrizaje suave. Nada más tocar el suelo, el avión hizo un movimiento brusco y al poco chocó contra un bloque, alago así como un edificio», explicó otro superviviente en declaraciones a la televisión recogidas por Efe. El aparato «se partió por la mitad y ardió», agregó

El jefe de las autoridades aeroportuarias, V. P. Agrawal, declaró que el piloto no envió ninguna señal pidiendo socorro que sugiriese un problema técnico.