El genio de Gila ya lo había descubierto hace muchos años. Las cosas hay que explicarlas bien para que se entiendan: «Mi padre me decía `como vengas tarde te doy una somanta de palos', y yo le entendía. Había comunicación», contaba. Eso es educación. El problema es no decir las cosas como son. En eso, Fernando Savater es de la misma escuela (...): «La educacción para la paz no consiste ante todo en deslegitimar la violencia, sino en legitimar el Estado de derecho en que vivimos, sus instituciones y su Constitución». ¿Ven? Así sí que se entiende. Hay comunicación. Así que, que le cambien de nombre: Plan de Adoctrinamiento Constitucional.