Lo modelos meteorológicos vaticinan un verano algo más fresco que lo habitual
Aún faltan días para la entrada del verano y mientras las piscinas públicas se ponen a punto, en algunas zonas ya ha comenzado la temporada de playas. La pregunta es ¿qué tiempo hará este verano? Los modelos europeo y americano no pintan bien; ni las témporas.
Joseba VIVANCO |
Por fin, la temperatura del agua del mar en la costa vasca alcanzó ayer los 17º, justo cuando empieza a generalizarse la apertura de la temporada de playas, antes incluso de lo habitual. Por estas fechas, además de preguntar a nuestra báscula, cual bruja de Blancanieves, si estamos en el peso ideal, el otro interrogante suele ser el de cómo será este verano, después de un invierno más o menos pasado por agua y una primavera todavía revoltosa. En principio, parece que la cosa no pinta bien, así que mejor disfrutar de hoy y mañana.
Acabamos de dejar atrás un mes de mayo que ha tenido de casi todo: desde los -13º que el termómetro de la dolina de Camalonga (en Larra-Belagoa) registró el 7 de mayo, a los 31,1º que alcanzó en la estación meteorológica de Hondarribia el día 24. Junio ha comenzado bajo el ``ausente'' durante el anticiclón de las Azores, brumas, nubes y algo de sirimiri. Ahora, dos días de sol y a partir del fin de semana, también calor pero con riesgo de tormentas vespertinas. Pero «después del calentón, viene el refrescón», quién sabe si a partir del lunes.
¿Qué pasará en los próximos meses estivales? A pesar de la enorme incertidumbre, los modelos que utilizan los servicios meteorológicos europeo o estadounidense se prestan a ese juego. Y lo que apuntan, por ahora, es que este verano podría estar hasta 2º por debajo de la temperatura media, según se comenta en los foros de internet.
No obstante, el veterano meteorólogo José Antonio Maldonado, en su blog, comentaba esta semana que «hoy por hoy, no es posible llevar a cabo ese tipo de pronósticos. Estos pronósticos no pueden considerarse muy prácticos, de momento, porque todavía su fiabilidad no es grande y porque son bastante ambiguos en los dos parámetros a los que está referido».
¿Qué dicen las témporas?
Así que guiarse o no por ellos tiene un poco o mucho de acto de fe, como ocurre con las recurrentes témporas. Más allá de su base acientífica, el hecho de formar parte de la cultura popular las hacen estar en boca de todos. La semana pasada fueron las témporas de verano y ésta han sido las llamadas contratémporas. Atentas a ellas ha estado el franciscano Pello Zabala, allá en el santuario de Arantzazu.
«Ha sido llamativo que la semana de témporas parece haber sido programada: diez días de tiempo sano y limpido... llega el miércoles de témporas, Pentecostés, y se tuerce el aire, que parece enfermar de humedad y suciedad... sigue así la semana entera, y a partir de esta tarde -por ayer-, llega de nuevo el tiempo sano, conectando con el martes de la semana pasada», llamaba la atención.
«Estos días de témporas hemos tenido un aire enfermo, con mucha humedad y poco sano. Y no ha llovido mucho, pero tampoco poco», añade. ¿Y en qué se traduce de cara al verano? El pronóstico que hace Zabala es que «faltará el viento que sabe limpiar el cielo de nubes, hará calor, pero abochornado, un verano de sudar, con tardes tendiendo a tormentosas...».
Esos serían los elementos a resaltar. «Esa presencia de nubes en verano propicia humedad del aire, del ambiente, y eso hace que no haya muchas horas de sol, pero que el calor sea pegajoso, bochornoso, de sudar por nada, de cambiarse la camisa...», apuntilla el conocido fraile, aunque abra una puerta a la esperanza con la mejoría habida en la tarde de ayer, última de contratémporas.
Modelos o témporas, parece que no pinta bien en nuestro entorno. Lo auguraba estos días la directora de Igeldo, Margarita Martín: «El verano tiene una predicción poco halagüeña». Y es que el agua de mar ha estado más fría de lo normal e «igual tenemos un verano que no se va a comportar como esperamos».
El tiempo, nunca mejor dicho, lo dirá. Porque, en el fondo, como el Grupo de Variabilidad Climática de la UPV-EHU responde en su web a la pregunta de ¿qué tiempo hará este verano?, «más calor y menos lluvia que en invierno». Y nunca se equivocan.