El Gobierno cubano traslada a seis presos tras su reunión con la Iglesia
GARA |
El Gobierno de Raúl Castro trasladó ayer a seis disidentes presos a cárceles de sus provincias de residencia, en su primer paso en el proceso de diálogo abierto con la Iglesia católica cubana.
La medida llegó dos semanas después de la inédita reunión entre Castro y las autoridades católicas en la isla, con la que se confirmó el papel de mediación de la Iglesia cubana ante el Gobierno en favor de los presos opositores.
Lo que la jerarquía católica de la isla insiste en definir como «un proceso» ha comenzado finalmente con el acercamiento a sus provincias de residencia de seis prisioneros: Félix Navarro, José Luis García Paneque, Iván Adolfo Hernández Carrillo, Diosdado González Marrero, Arnaldo Ramos Lauzurique y Antonio Ramón Díaz Sánchez.
La lista fue difundida por el Arzobispado de La Habana en una nota de prensa, donde se indica que el Gobierno cubano informó a su titular, el cardenal Jaime Ortega, de estos acercamientos.
La nota confirmó diversos datos que manejaron la disidencia interna cubana y familiares de presos a lo largo del martes. Pero también reforzó, según algunos analistas, el papel «central» de la Iglesia en el proceso abierto con el Gobierno.
La Iglesia anunció que ella misma confirmará los datos «fidedignos» de este proceso para evitar las «especulaciones» de estos días.