Ausbanc destaca que en Bizkaia hay más 200 demandas por «swaps»
La delegada en Bizkaia de Ausbanc, Marisa Gracia, confirmó que todavía «muchos consumidores son víctimas de permutas financieras, `swaps' o `clips'». Mantiene más de 200 demandas contra los bancos.
Juanjo BASTERRA |
Ausbanc alertó ayer en Bilbo de que todavía siguen apareciendo casos de ciudadanos que «en un sentido coloquial han sido estafados por los bancos y algunas cajas de ahorro», un año después de que comenzaran a aparecer los sofisticados productos de especulación financiera, conocidos como permutas financieras «swaps» o «clips». Marisa Gracia, delegada de Ausbanc en Bilbo, adelantó que tiene 200 demandas de usuarios y destacó que «estamos saturados».
La delegada de Ausbanc explicó que, «aunque ya tenemos más de cinco sentencias a favor a nivel estatal, siguen apareciendo estos productos basados en la especulación financiera». El más reciente caso llegó a la sede de Bilbo antes de ayer. «Un usuario de nuestro servicio nos denuncia que le ha llegado del Banco Santander una comunicación de que debe 1.800 euros, una vez que había ya cancelado con esa entidad bancaria el préstamo hipotecario». Ese hecho se debe a que la permuta financiera no va unida a la hipoteca, sino que son dos productos diferentes y diferenciados.
Marisa Gracia llamó la atención por la desproporción que existe en esas permutas financieras, porque «si te va bien, como una pareja que se acercó a la oficina, nos dijo que le pagaban por intereses 3,25 euros; pero al bajar el Euríbor ellos tienen que pagar 700 euros al banco. Es desproporcionado».
Ausbanc estima que hay entre 30.000 y 40.000 personas o pequeñas empresas afectadas por este sistema especulativo, por lo que se calcula que los ingresos que obtienen los bancos que han utilizado esas permutas financieras se elevan a unos 480 millones de euros por año, con unos cálculos muy ajustados, porque cerrar antes de tiempo esos seguros significa tener que «depositar de golpe la cantidad total», denunció la responsable de Ausbanc.
Marisa Gracia aseguró en su comparecencia ante los medios de comunicación que «esos productos son nocivos para los clientes» y, a su juicio, supone «una comercialización engañosa de estos sofisticados productos, disfrazados como seguros contra la subida de tipos de interés, pero tiene enredados a miles de afectados que han sufrido en sus patrimonios el impacto de las cuantiosas liquidaciones a favor del banco y de las onerosas indemnizaciones por cancelación anticipada de los mismos».