El presidente de la Real Sociedad, Jokin Aperribay, firmó ayer en el antepalco de Anoeta los contratos resultantes de un nuevo convenio de colaboración para el fútbol base que ha logrado el respaldo de todo el fútbol guipuzcoano. Todos los clubes con equipos inferiores menos el Mariño, convenido en la actualidad con Osasuna, se han adherido a un convenio por el que la Real les destinará entre un 1% y un 2% de su presupuesto anual.

El nuevo convenio tiene un valor muy grande porque el nuevo Consejo abordó el proceso desde una situación muy complicada porque todos los clubes estaban sin contrato tras entrar la Real en Ley Concursal y no abonar las cantidades estipuladas en los anteriores. Además había una profunda división en el fútbol guipuzcoano.

Por ello tiene mayor mérito que la Real haya conseguido la firma de todos los clubes en un mismo convenio en el que no aparecen cantidades fijas para cada uno, ya que dependerán de aspectos como el presupuesto de la Real, el nivel de los equipos que tenga cada club y de la cualificación de sus técnicos.

Hasta ayer era dudoso que Antiguoko y Eibar fueran a firmarlo, pero lo hicieron, como el Real Unión. Los dos últimos tendrán otro convenio de fútbol profesional en el que la Diputación aportará una cantidad y la Real 100.000 euros sólo si está en Primera. Sí abonará una cantidad por el fútbol base a todos los clubes si bajara a Segunda, aunque menor. El contrato firmado ayer es para dos años, aunque se renovará automáticamente si ninguna de las dos partes no indica lo contrario.

El espíritu del convenio

En el nuevo convenio, la Real «considera el modelo deportivo basado en la cantera como la mejor opción para el cumplimiento de las funciones de carácter social y de promoción deportiva, así como la vía para dotarle de la estabilidad económica necesaria que permita alcanzar los logros deportivos».

El club convenido se compromete a tener una relación de exclusividad con la Real, sin poder convenirse con otro club que no esté convenido con ella. Además deberá ceder un máximo de cuatro jugadores cada año a la cantera de Zubieta, con un máximo de dos de una misma generación. A cambio, la Real pagará 700 euros por cada infantil, 1.500 por cada cadete, 2.100 por cada juvenil y 3.000 euros por cada senior, que se repartirán entre los clubes convenidos a los que haya pertenecido el jugador desde la categoría alevín.

Se prima a los clubes que más aportan y además recibirán 6.000 euros cuando un jugador suyo dispute cinco partidos en Primera, 15.000 cuando supere los 30 en Primera, 6.000 cuando supere los 30 en Segunda y otros 6.000 cuando supere los 200 partidos en Primera.

Si la Real traspasa un jugador de la cantera, el 10% de lo que se recaude, sin límite, se repartirá entre los clubes guipuzcoanos. El 5% irá para el último antes de llegar a la Real, el 2% se repartirá entre todos los clubes, otro 2% entre los que lo formaron y un 1% a la Fundación que está en proceso de gestación y que será la que se encargue de la cantera.