Dos ciudadanos vascos encarcelados en la prisión de Granada han denunciado que un carcelero «azuzó e intentó convencer» a presos comunes para que éstos «les agredieran». Una nota emitida por Etxerat y en la que no se precisa la identidad de los dos presos vascos, se manifiesta que ante la negativa de los presos comunes a arremeter contra los vascos, el carcelero «está haciendo la vida imposible» tanto a estos dos presos vascos como a los comunes que se opusieron a golpearlos.

La misma nota informa de que la celda del preso arrasatearra Txus Goikoetxea, en la prisión de Puerto I, ha sido registrada hasta en cinco ocasiones y prácticamente de manera consecutiva.

Asimismo, ayer se conoció que el preso gravemente enfermo Jon Agirre Agiriano sufre una infección intestinal. El movimiento pro amnistía indicaba, en una nota de prensa, que pese a que el tratamiento le había suavizado el dolor que padece, el Hospital de Basurto había decidido mantener en observación al vecino de Aramaio.

Justamente ayer se cumplían tres décadas desde que Jose Mari Sagardui, Gatza, era arrestado y sus vecinos denunciaron el largo cautiverio al que le tienen sometido. Para ello, el miércoles, 31 coches realizaron una caravana de coches por el municipio y ayer, 192 personas llevaron a cabo una concen- tración. En Eibar fueron 65 las personas que se congregaron a favor de los derechos de los presos.

El balance dado a conocer por Etxerat da cuenta de numerosos vis a vises perdidos debido a los intentos de cacheo a los que siguen siendo sometidos los familiares. Ocho meses después de que se comenzaran a perder visitas por este motivo, Inma Pacho y Fernan Elejalde, han perdido sus vis a vises durante el pasado fin de semana, en la cárcel de Algeciras y Puerto I, respectivamente.

En la de Almería han sido nueve vis a vises los que se han perdido durante este mes de junio; y en Ocaña I tres y en Herrera dos, sólo en el último fin de semana.

En la prisión de Curtis el fin de semana pasado el preso Zigor Blanco no tuvo vis a vis, mientras que con Naiara Mallabia sólo pudieron estas sus hermanos, ya que al ser menores de edad no fueron cacheados. Con objeto de denunciar la pérdida de estas visitas, y especialmente, el acoso que sufren los familiares, los presos de Curtis llevan los últimos dos lunes de chapeo.