Unos informes incautados en uno de los despachos del ex miembro del Araba Buru Batzar Aitor Tellleria han hecho levantar sospechas de que la Ertzaintza guarda información comprometedora de los ciudadanos. Los documentos que están siendo estudiados por la Audiencia de Gasteiz incluyen, según difundieron ayer varios medios, seguimientos a personalidades alavesas e información de los «bancos de datos» que al parecer guarda la Policía autonómica.

Estos informes fueron obtenidos tras el registro de los despachos de Telleria -imputado en la presunta trama de cohecho que salpica a varios dirigentes del PNV en Araba- y, principalmente, se centran en aspectos «muy íntimos» de las personas vigiladas, por lo que no guardan relación con hechos delictivos o ilegales que podrían haber cometido los espiados. Por tanto, dichos informes no cuentan con ningún tipo de respaldo o impulso judicial para espiar no sólo a cargos políticos, sino también del ámbito económico.

Asimismo se han localizado copias de informes confidenciales elaborados por la Ertzaintza a los que tan sólo se podría haber accedido desde las bases de datos de la Policía autonómica.

Desde hace un mes la Audiencia de Gasteiz se encuentra investigando este caso de espionaje y el miércoles, junto a Aitor Telleria, fueron llamados a declarar dos ertzainas como imputados. En estos momentos, de acuerdo con lo publicado ayer en varios rotativos españoles, la investigación se centra en determinar si altos cargos conocían estos hechos dentro de la Unidad de Información de la Ertzaintza en Araba.

De esas filtraciones se desprende que los documentos que contienen información embarazosa habrían sido elaborados en 2009 y también en años anteriores, durante el mandato de Javier Balza al frente del Departamento de Interior del Gobierno de Lakua.

Ares aparta a dos ertzainas

El Departamento de Interior de Lakua emitió ayer una escueta nota en la que informaba de que se ha abierto un expediente disciplinario interno y se ha apartado del servicio a los dos ertzainas imputados que el jueves declararon ante el juez.

La nota del departamento dirigido por Rodolfo Ares añadía que Interior colaborará «en todo momento» con la autoridad judicial en la investigación para «el total esclarecimiento de los hechos» que se les imputan a los dos agentes, que pertenecen a la Unidad de Información de Araba.

Durante la jornada de ayer no se hicieron esperar las reacciones de diferentes formaciones políticas. Mientras PP y PSE exigieron explicaciones al PNV, los jeltzales insistieron en que su partido «ni espía ni tiene espías a su servicio». El diputado general de Araba, Xabier Agirre, opinó que podría haber intereses políticos para «desgastar» al PNV antes de las elecciones.