ELA y LAB abandonan Osalan
ELA acusa al Gobierno de Lakua de «estar al servicio de la patronal»
ELA concentró ayer en Bilbo a 1.200 delegados sindicales para explicarles la decisión, adoptada junto a LAB, de suspender su participación en Osalan. Adolfo Muñoz señaló que el Gobierno de Gasteiz está «al servicio de la patronal» y lamentó que haya optado por el modelo español, que «es un fracaso». Muñoz recordó que ese paso se une a los anteriores en Hobetuz y la Comisión para la Mejora del Empleo. «Somos coherentes y nos cuesta 850.000 euros», dijo.
Juanjo BASTERRA | BILBO
ELA concentró en el frontón de La Esperanza de Bilbo a 1.200 delegados sindicales para explicarles los motivos que le han llevado, junto a LAB, a suspender su participación en el Consejo General de Osalan. Después se dirigieron en manifestación hasta la sede del Gobierno de Patxi López en Gran Vía.
«Horrelako Osalanik ez! Por otras políticas de salud laboral» fue el lema escogido por la central en este acto y que, según destacaron sus representantes, no significa el fin de su actividad en materia de prevención de riesgos laborales, sino que «se abre una nueva etapa donde tendremos que continuar con el trabajo para garantizar la prevención de riesgos laborales, para que los empresarios cumplan con la legislación y no vayamos al puesto de trabajo a perder la salud y la vida», como dijo Janire Domínguez, del área de Salud Laboral.
Adolfo Muñoz, Txiki, recordó que «venimos de una huelga general de la mayoría sindical vasca y nuestra militancia está contenta. Es un síntoma que certifica que la huelga salió bien. Lo sabemos nosotros y la patronal». A su juicio, «la lección que debemos aprender del 29 de junio es que no hay que dar cobertura a los gobiernos en la aplicación de las medidas de ajuste. CCOO y UGT se han unido a Patxi López y a Miguel Sanz en materia de diálogo social que avala las políticas en contra de los trabajadores».
Para el líder sindical, «hay un plan de asimilación y uniformización evidente» y «son decisiones y estrategias políticas» con el objetivo de que «no quede ningún resquicio de autorregulación, del marco vasco de relaciones laborales». En concreto, sobre Osalan dijo que «es un modelo al servicio de la patronal. Sin vigilancia, sin infracciones, sin sanción y haciendo la vista gorda ante el fraude de ley». Puso como ejemplo que Confebask «se alegraba de que la salud laboral había dejado de ser tema conflictivo». Muñoz explicó que esas manifestaciones de los empresarios se deben a la falta de sensibilización en materia preventiva. Apuntó, en este sentido, que el 72% de las personas que se accidentan son trabajadores temporales, de los que el 26% pertenecen a subcontratas, el 17% son de ETT y un 10% son inmigrantes, «muy por encima de de su peso en la población ocupada».
Txiki Muñoz recordó que la gota que colmó el vaso en Osalan fue «la renuncia expresa a defender las cuotas excedentarias de las mutuas. Es convertir a Osalan en algo inútil para hacer aquí lo mismo que se hace en el Estado español», precisó.
Leire Txakartegi, secretaria de Salud Laboral de ELA, denunció que «se ha vaciado de contenido a Osalan por una decisión política para llevar las decisiones a la mesa de diálogo social, donde hay un compadreo entre el Gobierno de Patxi López, los empresarios y la minoría sindical». A la portavoz del Gobierno de Gasteiz, Idoia Mendia, le respondió que «nuestra decisión es política; lo mismo que la de abrir la vía del reparto de fondos a CCOO, UGT y Confebask de los excedentes de las mutuas. Se van a repartir 850.000 euros».
Txakartegi denunció que el Gobierno de Lakua renunció a la defensa de la competencia y, en cambio, sí acuerda medidas ligadas al Estado español como los acuerdos con la Fundación laboral de la Construcción o con la Fundación para la Prevención de Riesgos Laborales. ELA ofreció el dato de que sólo el 40% del personal que trabaja en Osalan realiza tareas técnicas.
La salida de ELA de Osalan, de Hobetuz y de la Comisión para la Mejora de Empleo le costará 850.000 euros, como dijo su secretario general, pero agregó que «somos coherentes y eso nos cuesta». Juanjo BASTERRA
CCOO de Euskadi censuró a ELA porque, según explicó la central que lidera Unai Sordo, «en materia de salud laboral ya no está, nunca supo, ni se le espera» y tachó de «enfermizo y reaccionario el discurso dirigido a deslegitimar los recursos económicos que se destinan a actuaciones de prevención de riesgos laborales».
