Etxerat, al igual que centenares de vascos que se dieron cita en las concentraciones de anoche, mostraron su repulsa ante las «extremas situaciones» que sufren algunos presos políticos vascos. El colectivo de familiares, mediante una nota, trajo a colación el estado de Jon Agirre Agiriano, que se encuentra en el hospital aquejado de una infección intestinal.

También hizo especial hincapié en los cinco presos que están desarrollando sendas huelgas de hambre en el Estado francés en denuncia de la situación de aislamiento en la que se encuentran. Precisamente en Ibarra, de donde es Maite Aranalde, llevan toda la semana denunciando mediante asambleas informativas, cadenas humanas o concentraciones su situación.

Mientras tanto en numerosos municipios desarrollaron concentraciones en favor de los presos. Así en Antzuola se reunieron 20 vecinos; en Urretxu-Zumarraga 50; en Deba 45; en Donostia 190; en Getaria 30; en Zarautz 160; en Hernani 200; en Orereta 186; en Lezo 29; en Lazkao 170; en Lizartza 42; en Soraluze 53; en Algorta 83; en Gatika 12; en Lekeitio 127; en Mundaka 30; en la capital vizcaina, frente a la Sabin Etxea, 115; en el barrio bilbaino de Santutxu 75; en Ugao 29; en Ondarroa 207; en Zornotza 90; en la capital alavesa fueron 340; en Iruñea llegaron 224 los concentrados; en Etxarri Aranatz 45; en Bera 12; en Arbizu 35; en Lizarra 40; y en la localidad de Barañain 14.