Ayer se escribió un capítulo más en la historia del terreno de 35.000 metros cuadrados que se sitúa entre el río Cotorrio y el polideportivo municipal de Muskiz. Después de que Petronor acusara al Ayuntamiento de no cumplir «un principio de acuerdo» y diera por roto el consenso, ayer el alcalde, Gonzalo Riancho, se reafirmó en que el espacio estaba siendo utilizado por la refinería desde hace más de veinte años de forma ilegal. El proceso para obligar a la refinería al desalojo comenzó hace un año y medio.

La semana pasada, Petronor se puso manos a la obra para dejar libre de materiales el terreno que utilizaba como almacén pese a carecer de las licencias municipales. Así, el Ayuntamiento le marcó un plazo de cinco días para presentar un estudio con el que iniciar su desmantelamiento bajo la amenaza de precintar el recinto. Entonces, fuentes de la empresa explicaron que «si se ha mantenido ese uso de almacén es porque, hace ya año y medio, Petronor manifestó al Ayuntamiento su voluntad de alcanzar un acuerdo sobre el uso provisional de esa parcela como almacén de piezas y materiales». Concretamente, el acuerdo marcaba un periodo de cuatro años, transcurridos los cuáles pasaría a ser de propiedad de la localidad como parque público. Ahora, Petronor dice que el convenio quedaría roto y que la empresa «mantendrá la titularidad y uso de la parcela».

Gonzalo Riancho, por su parte, relató que lo que ha ocurrido es que «después de retrasar y prolongar los límites, ha llegado un momento en que el Consistorio no puede esperar más para que Petronor presente la documentación pertinente». Respecto a que la empresa se reafirme en la titularidad de los terrenos, declaró que estudiarán las fórmulas que existen para poder disponer para uso y disfrute de los vecinos de este terreno. Además, espera que para finales de setiembre el almacén esté desalojado.