El Jazzaldia encara su recta final, sin que casi nos hayamos dado cuenta. Ensimismados con la eclecticidad de sonidos dispuestos desde las tardes del Victoria Eugenia hasta las madrugadas de la Zurriola, Donostia duerme poco estos días, y apenas se acuerda de comer. Solo faltan dos días para que finalize la 45 edición de este extraordinario festival y, aprovechando que la meteorología es cada vez más favorable, habrá que exprimir la programación, hasta la última corchea.

Hoy sábado, las kalejiras de Pixie Dixie y Bifunk, que partirán a las 19.00 desde el Ayuntamiento, amenizarán las calles de Donostia. Para entonces George Benson estará actuando en el Kursaal, recinto para el que ha vendido todo el papel. El ecléctico guitarrista, que en su día sorprendió con su trabajo «Givin´ It Up» -junto a Al Jarreau, que desde anteayer se encuentra gravemente hospitalizado-, abordará el repertorio de su reciente «Songs and Stories» en sexteto.

Por su parte, la Plaza de la Trinidad, reducto por excelencia del jazz más jazz, acogerá la doble sesión de The Claudia Quintet y la del cuarteto de Archie Shepp, acompañado de Mina Agossi a la voz. El primero es un conjunto joven e innovador dirigido por el batería y compositor John Hollenbeck. Por su parte, el saxofonista Shepp es una leyenda que lleva cuatro décadas en activo y grabó para el sello Impulse algunos trabajos fundamentales de free jazz. En la Trinidad lo acompañará Mina Agossi, cantante francesa de origen africano que lleva una década colaborando con Shepp.

Pero, llegado el fin de semana, la playa cobra protagonismo y alrededor del Kursaal y de la Zurriola se aglutinará el mayor número de melómanos. En la Carpa Heineken, sólo por poner un ejemplo -con tres conjuntos en escena-, actuará Xavier Monge Trío, con Ignasi González al bajo y David Xirgu a la batería junto al pianista, banda catalana que enriquece la campaña gastronómica de publicidad turística que Lleida realiza en esta edición del Jazzaldia. En el Espacio Frigo, otro ejemplo, New Project Swing Orchestra. Numerosísima banda de Trento (Italia), que repetirá actuación el domingo y que interpretará clásicos del jazz de todos los tiempos.

Como es habitual, el Escenario Verde acogerá las miradas y los curiosos oídos de los más jóvenes, con propuestas multitudinarias: The Divine Comedy y The Pains of Being Pure at Heart. El gentlemen Neil Hannon, irlandés de talento refinado, interpretará sus cristalinas gemas pop para dar paso al jovencísimo quinteto de noise pop procedente de Brooklyn, en la ciudad de Nueva York.

Después, la noche se perderá entre Altxerri y Be Bop, donde la fiesta nunca acaba.

Recordar que, como la organización anunció anteriormente, el concierto de Toquinho, que debía actuar a la medianoche, fue suspendido.

Manos y cuerdas

Ayer, Wadada Leo Smith abrió la jornada en cuarteto, con una propuesta elegante que nos agradó y del que daremos cuenta con más detalle mañana, al igual que del doble cartel de la Trinidad, donde con temperatura fresca y alguna que otra gota, Dave Holland y Pepe Habichuela demostraron tener duende al hermanar sus cuerdas tal como han hecho en «Hands», donde el prestigioso contrabajista británico `aprende' a tocar flamenco con su maestro Habichuela. Lo demostraron en un directo que contó con la participación de Josemi Carmona a la guitarra -indispensable para el proyecto, según Holland-, además de Juan Carmona y Bandolero a la percusión.

De dicho feeling hablaron los veteranos músicos por la mañana, en un encuentro con la prensa. Sonrientes y relajados, Holland, que no habla castellano, y Habichuela, que no sabe inglés, coincidieron en más de una respuesta, como al señalar que se entienden «con el corazón».

La idea de colaboración surgió en 2006, tras lo cual Holland y Habichuela tuvieron un encuentro. Desde entonces, todos los años se han juntado para trabajar juntos, sobre una base de flamenco clásico realizada por el maestro. Holland comprendió entonces que «era una música bella y compleja», y que tendría que trabajar mucho», pues creía que conocía algo del flamenco y se dio cuenta de que «no sabía nada». «Es una música alegre y al mismo tiempo triste, que expresa al pueblo gitano».

«Pepe ha sido un maestro paciente», dijo Holland de Habichuela, sorprendido de la sutileza de su guitarra. Por su parte, Habichuela señaló que «Dave quería aprenderlo todo, hasta la respiración flamenca». La conexión entre ambos era notoria y se comprobó en la rueda de prensa. Josemi Carmona también relató cómo Holland trató de enseñarles a improvisar como en el jazz. Y es que hay colaboración para rato.

El primer resultado, «Hands» (manos), con un dúo de altura, dos músicos excepcionales que disfrutan tocando juntos.