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El Banco de España considera la reforma laboral clave para moderar los salarios

El organismo supervisor considera que la reforma laboral española favorecerá la moderación salarial en el segundo semestre de 2010. Asimismo, valora que la reforma será el «ingrediente fundamental» para que se consolide el crecimiento del consumo.
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El Banco de España valora positivamente la reforma laboral porque afirma que favorecerá la moderación salarial en la segunda parte del año, lo que confirmaría la desaceleración del crecimiento de las retribuciones registrado desde inicios de 2010.

Dentro de su último boletín económico el organismo supervisor ve positivo que los cambios en el mercado de trabajo incluyan vías para facilitar el «descuelgue salarial», lo que permite a pequeñas y medianas empresas con dificultades económicas no aplicar las subidas salariales pactadas en los convenios colectivos sectoriales.

El Banco de España considera, asimismo, que la reforma del mercado de trabajo en el Estado español será clave para la recuperación sostenida del consumo, pues valora que ayudará a restablecer la confianza de los consumidores al contar con un panorama menos incierto en lo que a sus perspectivas laborales se refiere.

«Ingrediente fundamental»

En este sentido, asegura que la reducción de la incertidumbre sobre el mercado laboral, al hilo de la reforma en marcha, será un «ingrediente fundamental» para que se consolide el crecimiento del consumo.

En términos generales, la entidad cree que la rápida consecución de las reformas estructurales son muy importantes para restablecer la confianza e impulsar el crecimiento económico a largo plazo.

Medidas fiscales restrictivas

Asimismo, el Banco de España considera que el Gobierno debe estar preparado para llevar a cabo medidas fiscales restrictivas adicionales si la consecución de los objetivos presupuestarios se viera en peligro. Así, califica de «adecuadas» las medidas de ajuste tomadas por el Gobierno, si bien subraya que es «crucial» su rápida puesta en marcha para garantizar la credibilidad de la senda de ajuste a medio plazo. Según el organismo supervisor, el plan de consolidación fiscal del Ejecutivo está sujeto a riesgos apreciables, ya que algunas medidas tienen que ser todavía detalladas, en concreto las relativas a la consecución del techo de gasto para 2011 y todas las que afectan a los recortes en las Administraciones Territoriales, sobre todo el próximo año.

Destaca que las medidas de ajuste fiscal suponen un paso importante para la consecución de los objetivos presupuestarios de 2010 y 2011 porque se han centrado en recortes permanentes del gasto público. En este sentido, incide en que la composición del ajuste relativa al gasto corriente es «apropiada».

Los alemanes quieren «su parte de la tarta»

La economía alemana deja atrás la recesión por lo que los trabajadores han reclamado «su parte de la tarta», que se traduce en subida de salarios. Oliver Burkhard, de IG Metall, el sindicato más grande de Europa, señaló que «el tema clave no es ya la protección de empleo, es la renta». Ya que, desde los años 90, y más aún durante la crisis económica que se desató en 2008, los asalariados alemanes pagaron la conservación de su empleo al precio de mínimas o incluso inexistentes subidas de salarios.

Pero la economía alemana, y en particular la industria, se ha restablecido este año antes de lo previsto. Los resultados trimestrales de las empresas son positivas y la Bolsa de Fráncfort sube. Por ello, Burkhard, de IG Metall, afirmó que «queremos nuestra parte de la tarta». Para el presidente del sindicato, Berthold Huber, el imperativo de su demanda es doble: «más equidad en la distribución de las rentas» y un crecimiento «más equilibrado».

Algunos economistas, como Peter Bofinger, considerado uno de los «Cinco Sabios» que aconseja al Gobierno sobre su política económica, consideran que «necesitamos subidas de salarios sustanciales, de al menos un 3%». Por su parte, el presidente de la federación de la patronal BDA, señaló que «el debate sobre subidas salariales es prematuro».

En otoño llegarán las negociaciones del convenio colectivo del sector de la siderurgia que emplea a 85.000 personas. Tendrán un valor de prueba ante la demanda de los trabajadores de aumentar los salarios. GARA

CONVENIOS

El Banco de España ve positivo que los cambios en el mercado laboral incluyan vías para facilitar el «descuelgue salarial», lo que permitirá a las empresas no aplicar las subidas salariales pactadas en los convenios sectoriales.

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