OLASO
Teatro
La estrategia de la provocación para «caldear» el ambiente en vísperas de la Aste Nagusia bilbaina tiene diversos componentes. Primero Azkuna con el veto a tres konparsas y la puesta en cuestión del modelo festivo desarrollado desde 1979. Ahora el PP que, sin disimulo, pide que se impida instalar las txosnas en el recinto festivo. De lo que se trata es de bloquear el verdadero motor de una de las fiestas más populares: la participación. Saben que en ese terreno, pierden.