La grabación del documental solidario «Queremos tener un millón de amigos» ha llegado a su fin. Después de visitar quince pueblos del Estado español, los miembros del proyecto QTUMA rodaron ayer la última parte en Trintxerpe, con una gran fiesta que duró todo el día y para algunos también toda la noche.

Al igual que han hecho durante este mes y medio de viaje, las productoras Naniano, Zinea Sortzen, Contrasentido y Red Cam invitaron a la ciudadanía a unirse a la iniciativa y participar en el film. Así, vecinas y vecinos de Pasaia grabaron un videoclip con el grupo musical LosDelGás y con los jóvenes actores Natalia Sánchez y Víctor Elías, participantes ambos de la famosa serie «Los Serrano».

Tal como explicaron los impulsores, el objetivo de la iniciativa es «demostrar que se puede hacer cine sin contar con presupuestos millonarios como los que se mueven hoy en día». «Entre todos hemos conseguido rodar el documental de nuestra experiencia. Lo hemos conseguido», subrayaron felices.

Mediante esta película han querido hacer una llamada a la necesidad de cambio en la infraestructura del cine. Por una parte, indicaron que se les deben exigir resultados a los productos comerciales, para poder apoyar más a los proyectos culturales y de jóvenes realizadores. Por otro, instaron «a todos aquellos productores que han utilizado las subvenciones para vivir del cuento dificultando el crecimiento del sector a dejar de maniobrar en beneficio propio». Y pidieron nuevos formatos de explotación vía internet, series y películas on-line de calidad gratis con publicidad, o a un precio barato que compense al consumidor.

Esas son las razones que les llevaron el pasado 14 de julio a partir de viaje. Como dicen ellos, «a acercar el cine de verdad a los pueblos, a compartir historias, a divertirse, experimentar, reír, bailar, sufrir...». La primera parada tuvo lugar en Cantabria, en Mataporquera; luego vinieron Baños de la Encina (Jaén), Puebla de Obando (Badajoz)... Hasta completar una quincena de visitas. El director, Josu Ubiria, expresó que había sido un recorrido «muy largo» y que se encontraban «muy cansados», aunque estos hechos no les restaban ánimos para pasarlo bien. «Tenemos ganas de desinhibirnos», declaró.

Un millón de gracias

Un millón de amigos y un millón de gracias. Los impulsores no paraban de dar las gracias al equipo, «que ha hecho piña en unas condiciones que muchas veces no han sido las idóneas», a los colaboradores, a la gente que les ha dado de comer o les ha hecho un hueco en casa para dormir. «Queremos agradecer todos esos apoyos, desde la persona que te hace la lavadora hasta el que te prepara una paellada porque le gusta el proyecto y quiere participar en él».

Los participantes de QTUMA se quedan con el buen ambiente formado en el viaje y con las fascinantes vivencias que guarda esa gastada furgoneta que ha recorrido tantos kilómetros. Un miembro del grupo, de Azpeitia, explicó a GARA que una de las cosas más bonitas ha sido la diversidad de las personas que se han juntado. «Había gente de todo tipo y de distintos lugares», comentó. Él se unió a la iniciativa en la última parte, en Valencia, para ofrecer su apoyo durante ocho días. Otros trabajaban desde el principio y se les veía más cansados. Alguno había perdido hasta siete kilos.

Comer, dormir... Los participantes de QTUMA hacían todo juntos y por eso se han creado estrechos lazos entre ellos. La relación con vecinas y vecinos de los pueblos que han visitado también ha sido estupenda. Según apuntaron, en los pueblos pequeños la gente les ha ayudado mucho.

Tras esta enriquecedora experiencia, ayer era tiempo de celebraciones y el día estuvo lleno de tentadoras actividades: durante la mañana rodaron el videoclip en la calle, luego realizaron una comida y la fiesta continuó con cervezas en la txosna, proyecciones de cortos de humor y el concierto de LosDelGás por la noche, como colofón.