El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, instó ayer a buscar «nuevas soluciones» para resolver el conflicto de Oriente Medio, mientras la Autoridad Palestina (ANP) advertía, en palabras de su principal negociados, Saeb Erekat, de que un fracaso en las conversaciones llevarían a su «desaparición» y al fortalecimiento de Hamas.

El primer ministro israelí señaló que «el mundo árabe está maduro para la paz» y agregó que es el momento de avanzar con los palestinos en ese sentido. «Queremos lograr una reconciliación histórica con nuestros vecinos palestinos, que proteja nuestros intereses, sobre todo en el ámbito de la seguridad», insistió.

El jefe negociador palestino, Saeb Erekat, coincidió con él al indicar a una radio israelí que ambas partes habían alcanzado la «madurez» de entender que el precio de la guerra es mayor que el de la paz.

No obstante, en declaraciones a AFP, Erekat advirtió de que la Autoridad Palestina (ANP) dirigida por Mahmud Abbas podría disolverse si las conversaciones directas con Israel no dan lugar a un acuerdo. «Esperamos alcanzar un estado palestino. Si no lo hacemos ahora, volvemos a casa», señaló Erekat, quien añadió que tal escenario supondría una victoria sobre los islamistas de Hamas, que se oponen a cualquier compromiso con Israel y gobierna la Franja de Gaza.

«Si logramos un acuerdo, Hamas desaparecerá, pero si no, seremos nosotros los que desapareceremos», auguró.

Erekat sostuvo que si ambas partes firman un acuerdo final sobre asuntos clave -que Netanyahu sometería a referendo- «recuperaremos Gaza».

«Soluciones prácticas»

En su discurso ante el Consejo de Ministros, Netanyahu pidió «aprender de las lecciones del pasado y pensar de una forma original» en este nuevo diálogo. «Hace falta un pensamiento creativo y novedoso de cara a resolver asuntos complejos», señaló, sin citar a cuáles se refería. Consideró que para alcanzar «soluciones prácticas» es necesario pensar «nuevas soluciones a viejos problemas».

Algunas de principales escollos en la negociación son la situación en Jerusalén Este y las colonias judías en territorio palestino la importancia del «pensamiento creativo» para resolver las cuestiones espinosas.

Durante la reunión, Netanyahu indicó que aún no se ha hablado sobre la construcción en las colonias judías en Cisjordania, cuya moratoria concluye el 26 de setiembre.

La ANP han amenazado con romper el diálogo si se levanta la moratoria israelí de diez meses, mientras que los socios de Netanyahu en el Gobierno han advertido de que romperán la coalición si el primer ministro prolonga la prohibición de construir en Cisjordania. Netanyahu ya había anunciado su intención de no prolongar la moratoria, aunque se abstuvo de mencionarlo en Washington.

El presidente de la ANP, Mahmud Abbas, terció también sobre esta cuestión e insistió en que las conversaciones con Israel se centrarán inicialmente en asuntos de fronteras y seguridad y supeditó su éxito a los avances que se produzcan en esas materias. «Si hay progresos en estos dos asuntos, creo que las negociaciones continuarán, y si no hay progreso e Israel insiste en levantar la moratoria (sobre la construcción en las colonias judías en Cisjordania), creo que la situación será muy difícil».