EIBAR 0

MIRANDÉS 1

Primer tropiezo de la temporada para el Eibar, que pasó de poder dormir como líder a ver incluso cómo peligra su plaza en la zona de play off. El conjunto azulgrana fue de menos a más, pero ni siquiera pudieron amarrar el empate. Lo impidió Pablo Infante en el descuento.

Cosas del fútbol, el castigo pareció desmedido para el Eibar, pero el triunfo no resultó exagerado para el Mirandés. El equipo burgalés, repleto de ex azulgranas -ayer se sintieron tan en casa que incluso vistieron la segunda equipación del Eibar-, tiró de presión extenuante para maniatar a su rival. Tanto, que Javier Mandiola, que había apostado por colocar a dos puntas, tuvo que retocar el dibujo antes de llegar al descanso.

No sirvió de mucho. Cierto es que no hubo acciones de peligro claro en el área armera, pero tampoco el Eibar hizo trabajar a Wilfred.

Manix intentó solucionarlo tras el descanso, metiendo chispa al equipo. Pero como había sucedido con la potencia de Lago Junior, tampoco la picardía de Altuna, la verticalidad de Weijl o la calidad de Lanzarote bastaron para dejar los tres puntos en casa. Se acercaron en ocasiones, con una arrancada del costamarfileño, que abusó de individualismo, o con otra de Weijl, que estrelló el balón en el lateral de la portería; pero nunca tanto como para darse por seguros.

Ni siquiera la expulsión de Iván Agustín, a un cuarto de hora del final, ejerció de catapulta. Y lo que es peor, tampoco resignó al Mirandés. Con una pizca de suerte -el balón tocó en la barrera y en el palo antes de entrar-, pero también con el empuje suficiente para forzar una falta en el descuento y en inferioridad, el equipo de Carlos Pouso acabó llevándose los tres puntos, al materializar Infante una falta directa.

Derbi en Arlonagusia

En Arlonagusia, por otro lado, el Lemona se imponía por dos tantos a cero al Osasuna Promesas. Sendos goles de Imanol y Jon Orbegozo dieron el triunfo del conjunto cementero.

El resto de la jornada se disputa hoy, con derbi incluido en Mendizorrotza.