EA cree insuficiente el traspaso y apuesta por la vía soberanista
Eusko Alkartasuna manifestó ayer que el traspaso de las políticas activas de empleo no puede ser considerado negativo, pero apuntó que lo pactado por PNV y el Gobierno español «queda cojo», puesto que faltan las políticas pasivas y lo referido a la Seguridad Social. En consonancia con la mayoría sindical, exigieron un marco vasco de relaciones laborales.Iñaki IRIONDO |
Eusko Alkartasuna considera que la forma en la que se ha producido la transferencia de las políticas activas de empleo demuestra que la vía estatutaria «está muerta» y que es preciso apostar por el soberanismo.
En una rueda de prensa convocada en Gasteiz, el secretario general del partido, Pello Urizar, y el secretario de Economía y Fiscalidad de la Ejecutiva, Rafa Larreina, señalaron que la transferencia de la competencia y de los 472 millones de euros «no se puede considerar como negativa», pero resaltaron la necesidad de situarla en su contexto. Y ese contexto es que la competencia tenía que haberse traspasado hace 30 años, en cumplimiento del Estatuto de Gernika, y que es insuficiente como herramienta para la creación de empleo.
Frente a quienes consideran el traspaso un logro histórico y algo que las demás comunidades autonómicas no tienen, Larreina señaló que la CAV ha obtenido, con años de retraso, lo mismo que el resto de autonomías, «aquello que está recogido en su Estatuto».
Los dirigentes de EA lamentaron que los derechos recogidos en una Ley Orgánica como el Estatuto se hayan convertido «en mercancía» que el Gobierno español sólo concede en estado de necesidad. «Ahí se ve -afirmó Pello Urizar- que poco respeto tienen Madrid, el PSOE y el PP al Estatuto y a aquello a lo que tenemos derecho».
Junto a ello, señalaron que la transferencia de la competencia de políticas activas de empleo no puede considerarse una solución al problema del paro. Rafa Larreina recordó que sigue pendiente la transferencia de las políticas pasivas, lo relativo a las prestaciones y la Seguridad Social.
Recordaron, al mismo tiempo, que la apuesta de EA es la de alcanzar un marco vasco de relaciones laborales, como exige la mayoría sindical, de manera que las instituciones vascas puedan gestionar todo lo relativo al mundo del trabajo.
Además, Urizar y Larreina recordaron que lo que hay de momento es un principio de acuerdo, por lo que se mostraron partidarios de esperar a ver en qué se concreta finalmente la transferencia, ya que no sería la primera vez que Madrid altera sus acuerdos una vez solventado el escollo de la aprobación de los presupuestos.
Atender a la mayoría sindical
Otro de los puntos abordados por los dirigentes de EA fue el de la gestión que vaya a hacerse de la competencia una vez de que se transfiera. Larreina y Urizar demandaron del Gobierno de Lakua que en la dirección de Lanbide participen los representantes de la mayoría sindical, es decir, de ELA y LAB.
También reclamaron del Ejecutivo autonómico que levante el veto que ha impuesto a la participación de las cooperativas. Rafa Larreina manifestó que resulta paradójico que el cooperativismo vasco sea «un movimiento que es referente a nivel mundial y que para el Gobierno no existe».
El Estatuto, «vía muerta»
La forma en la que se ha conseguido la transferencia, después de 30 años y en el transcurso de una negociación presupuestaria con un Gobierno español angustiado y necesitado de apoyos, viene a demostrar para EA que «la vía del Estatuto es una vía muerta». Apuntaron que «sobre cualquier negociación sigue sobrevolando el café para todos de la Loapa» y destacaron las voces que se han alzado ya en el Estado español pidiendo que otras comunidades tengan las mismas competencias.
Además, el convertir los derechos en «mercancía» de negociación puede hacer que al igual que en un estado de necesidad se hace la transferencia, en otro momento se pueda intentar revertir.
EA sostiene que «si el PSOE y el PP han mostrado poco respeto al Estatuto, es preocupante que el PNV entre en su juego».
Para la formación independentista es hora de «avanzar por la vía soberanista, porque hablamos de los problemas de la gente de este país». Rafa Larreina señaló que en el Estado español sólo Araba, Bizkaia, Gipuzkoa y Araba cumplen los estándares europeos. «Estamos más cerca de Europa que de España -aseguró- y no se pueden aplicar aquí recetas españolas que son un desastre».
En cuanto al anuncio del PNV de que llevará a la negociación con el Gobierno español de los Presupuestos Generales del Estado materias como los del reconocimiento nacional y el derecho a decidir, Pello Urizar mostró su incredulidad de que mantengan esta apuesta hasta las últimas consecuencias. «Lo hemos experimentado en carne propia -dijo-. Ya vimos lo que hizo con la ley de consulta».
El PP de la CAV, que en principio valoró como buena noticia la transferencia, anunció ayer que exigirá al lehendakari que no firme el traspaso si se rompe la «caja única» de la Seguridad Social.