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Llega el Barcelona

Un exigente test para certificar la fiabilidad de San Mamés

Los leones sólo han perdido dos encuentros ligueros en casa desde el pasado 6 de diciembre, el más reciente ante el Atlético de Madrid.

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ATHLETIC-BARCELONA

GARA | BILBO

Desde el pasado 6 de diciembre de 2009, el Athletic sólo ha perdido dos encuentros ligueros en San Mamés, frente al Mallorca en la 35ª jornada del campeonato pasado y la más reciente derrota frente al Atlético de Madrid. Ello da una idea de la fortaleza en la que han convertido La Catedral los pupilos de Caparrós en su más reciente trayectoria deportiva.

Una consistencia que, de nuevo, tendrá que superar un duro examen con la visita del considerado en estos momentos mejor equipo del mundo. Una escuadra, la culé, que además se encuentra muy cómoda en el feudo rojiblanco, donde ha puntuado en diez de las doce últimas veces que ha jugado en la competición de la regularidad.

Sin embargo, la ausencia de su hombre franquicia, Leo Messi, todavía convaleciente de la dura entrada de Ujfalusi, le resta una buena dosis de peligrosidad, si se puede aceptar tal circunstancia en un equipo plagado de campeones mundialistas y que funciona con la precisión del relojero Guardiola.

Nadie, ni plantilla ni técnicos, han podido esconder su alivio por no tener que preocuparse durante los noventa minutos por la estrella argentina y sus imprevisibles arrancadas. De cualquier forma, conocida con suficiente antelación la ausencia de La Pulga, la mayor inquietud en Lezama en los últimos días ha estado centrada en conocer si Fernando Llorente llegaría con las suficientes garantías físicas al envite.

Llorente jugará

Finalmente, el delantero rojiblanco será de la partida, entre otras cosas porque se encuentra bastante mejor de su esguince en la rodilla pero, sobre todo, porque se trata de una pieza fundamental en el dibujo y el sistema de juego del Athletic, máxime contra un rival que buscará adueñarse de la pelota.

Para evitarlo, o al menos ponérselo más difícil, el técnico local, Joaquín Caparrós, dispondrá una medular de brega, regresando a esas posiciones tanto Orbaiz como Gurpegi, este último en la banda derecha. También habrá una variación en el otro carril, ya que Gabilondo recuperará su puesto en detrimento de Iñigo Pérez.

Aunque también tiene opciones Susaeta, lo más probable es que sea Igor Martínez quien haga las labores de enganche con Llorente. El joven gasteiztarra está siendo una de las sensaciones de este comienzo liguero y el míster rojiblanco le está premiando con continuidad.

Precisamente Caparrós habló de alguna de las claves para superar a los azulgranas: «Debemos imprimir un ritmo muy fuerte aunque tenga el riesgo de que paguemos luego el esfuerzo, debe primar el concepto colectivo sobre el individual y no cometer errores defensivos».

 

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