En horas previas al discurso del presidente chileno, Sebastián Piñera ante la Asamblea General de Naciones Unidas en Nueva York, un grupo de familiares y solidarios con los 35 mapuche en huelga de hambre irrumpió el jueves de manera pacífica y por unas siete horas en las dependencias de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) y de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), en la capital chilena.

Los comuneros depusieron la protesta, según el diario mapuche «Azkintuwe.org» tras conseguir entrevistarse, mediante videoconferencia, con el director general de la OIT, Juan Somavía, quien estaba participando en la Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) en Nueva York.

María Tralcal y Rodrigo Curipan, dos de los portavoces de los indígenas, que entraron en la sede de la OIT, dijeron en un comunicado que la ocupación respondió a la «nula voluntad del Ejecutivo para solucionar la problemática» de los comuneros en huelga desde hace hoy -por ayer- 76 días que solicitan, entre otras demandas, la abolición de la «Ley Antiterrorista».

También criticaron duramente al presidente, el derechista Sebastián Piñera, quien en su intervención señaló, obviando los motivos de la protesta, que «representa una paradoja que en nuestro país hayamos luchado tanto por salvar las vidas de los 33 mineros y tengamos simultáneamente a 34 comuneros mapuche que atentan contra sus propias vidas a través de una huelga de hambre».

Los portavoces mapuche acusaron al inquilino de La Moneda de estar «engañando y distrayendo a la opinión pública nacional e internacional con respecto a sus responsabilidades ante la grave situación que enfrentan los comuneros mapuche en ayuno, quienes han entrado en fase crítica arriesgando sus vidas de manera irreversible», en alusión a los prisioneros que han sido hospitalizados debido a su grave estado de salud.

Por ello, reiteraron su llamamiento a generar «una instancia de diálogo real» que dé respuesta a la situación.

La acción de los familiares recibió una respuesta del director general de la OIT, Juan Somavía, quien manifestó a través de una nota que había abordado el asunto con Piñera.

«Muy preocupado»

Asimismo, dijo a los allegados que «deben saber que estoy muy preocupado por la vida de los comuneros mapuche en huelga de hambre y espero que a través del diálogo, prontamente, se alcance una solución».

Los representantes mapuche han descartado participar en la mesa de diálogo anunciada por el Gobierno para abordar integralmente la problemática de los indígenas, porque la cita no contempla afrontar el tema específico del ayuno y las peticiones de los huelguistas. Denuncian que La Moneda busca poner una tirita en una gran herida, por lo que no solucionará el conflicto a largo plazo.

Por otro lado, el piquete del Comité Ético Contra la Tortura (CECT) de París informó a través de un comunicado de las diversas acciones que vienen llevando a cabo para denunciar la situación de los presos políticos mapuche en huelga, así como para expresarles su solidaridad.

Las actividades están dirigidas «a romper el cerco informativo» impuesto por las autoridades chilenas.

Por ello, han organizado diversos piquetes informativos entre los que citan el que llevaron a cabo durante una «misa solemne» que que se realizó el pasado domingo en presencia del embajador chileno en el Estado francés.

La nota también resalta el interés y las señas de solidaridad que despierta el caso en el país.