Seis de los diez presos políticos mapuche en huelga de hambre -algunos de ellos desde el 12 de julio- aseguraron haber sido amenazados por Jaime Mañalich, ministro chileno de Salud.

Los seis indígenas se encuentran en dependencias del hospital de Victoria -donde fueron trasladados desde la prisión de Angol- y recibieron la visita de Mañalich, quien pretendía convencerles de que depongan la protesta, tal y como hicieron -tras alcanzar un acuerdo con el Ejecutivo derechista de Sebastián Piñera- la mayoría de comuneros el sábado. Según aseguraron portavoces de los huelguistas, el titular de Salud les amenazó señalando que «daría la orden para que retornasen a la cárcel de Angol y que ahí los dejaría morir».

Tras dicha amenaza, apuntaron, se produjo un altercado verbal y Mañalich abandonó el lugar sin terminar siquiera de evaluar la situación de todos los mapuche.

El titular de Interior, Cristian Larroulet, también intentó, sin éxito, solventar la situación desde Temuko.

A través de un comunicado difundido ayer, los huelguistas remarcaron que mantendrán la huelga indefinida hasta que no se retire la figura de los testigos protegidos de los procesos judiciales contra los mapuche, entre otras demandas.

Por ello, hicieron un llamamiento a organizaciones y comunidades mapuche, como también a los organismos internacionales para que sigan movilizándose en apoyo la huelga que, aseguraron, están dispuestos a llevar «hasta las últimas consecuencias».