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La militancia de Madrid da la espalda a Zapatero rechazando a su candidata

Las aparentemente tranquilas aguas del PSOE comienzan a revolverse tras la bofetada que la militancia del partido en Madrid le propinó ayer al presidente Zapatero, y a buena parte de la dirección federal, en la mejilla de Trinidad Jiménez, la sonriente candidata de La Moncloa que anoche reconocía la victoria de su rival, Tomás Gómez, en unas primarias con gran participación.

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GARA | MADRID

Los militantes socialdemócratas de la Comunidad de Madrid han elegido a su secretario general, Tomás Gómez, frente a la candidata del secretario general del PSOE, Rodríguez Zapatero, tras un proceso de elecciones primarias a las que han prestado gran atención los medios españoles. Gómez ganó a Jiménez, según señalaron primero fuentes oficiosas y luego los datos prácticamente definitivos, aunque para todos los observadores el gran derrotado era Zapatero.

Y con él, figuras del Gobierno que no han dudado en mojarse en la campaña de Trinidad Jiménez. Aunque por escaso margen, los afiliados dieron su respaldo a Gómez, en contra del criterio expresado públicamente por varios pesos pesados del PSOE, incluidos su número dos, José Blanco; el ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba; la secretaria de Política Internacional, Elena Valenciano; el de Política Municipal, Antonio Hernando, y los jefes de filas del PSOE en el Congreso, José Antonio Alonso y Eduardo Madina.

Gómez venció también la resistencia de su antecesor, Rafael Simancas, y la de sus partidarios, y de más de la mitad del grupo del PSM en la Asamblea de Madrid. Cuando Gómez haga las próximas listas se verá qué heridas se pueden cerrar y cuáles no.

Desde los medios más cercanos al partido en el poder en el Estado español se aseguraba que Gómez habría logrado su triunfo por haber conseguido que su discurso de «autonomía del partido» frente a la dirección federal llegara al grueso de la militancia de forma más eficaz que el de su rival.

Dichos medios de comunicación también destacaban que la posición política «de izquierda» de Gómez ha seducido a más militantes que el discurso más bajo en calorías de la ministra.

Elegancia no se le puede negar a la oficialmente derrotada. No habían pasado dos horas desde el cierre de las urnas cuando las agencias informaban de que Trinidad Jiménez había admitido en su página web la derrota en las primarias de los socialdemócratas madrileños, había dado la enhorabuena a Tomás Gómez y había pedido a todos los compañeros de partido trabajar para «ganar Madrid». «Gracias a todas y todos los compañeros, por vuestro trabajo y apoyo. Enhorabuena al ganador. Y a partir de mañana, a ganar Madrid» es la frase que aparece en la parte superior de la web Trinipuede.

81% de participación

El secretario general del Partido Socialista de Madrid (PSM), Tomás Gómez, ganador de las primarias en Madrid, declaró que a partir de los resultados de estas elecciones primarias «ya no somos una opción u otra» sino que «estamos todos juntos, en un mismo equipo».

Gómez, según sus propios datos, habría ganado a la ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, con el 52% de los apoyos de los alrededor de 18.000 militantes del PSM de la Comunidad de Madrid, frente al 48% que habría recibido Jiménez. Los datos reales confirmaban poco después lo dicho por Gómez. El ex alcalde de Parla ganó las elecciones primarias con un 51,71% de los votos, con el recuento prácticamente terminado -a falta de escrutar sólo 51 papeletas-.

La participación en las primarias madrileñas fue del 80,97%. Gómez ha obtenido 7.596 votos, un 51,71%, y Jiménez 7.051, un 48%. Un total de 53 votos fueron emitidos en blanco y 31 fueron declarados nulos.

El candidato vencedor informó anoche de que la primera llamada que recibió fue la del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y a continuación la de su rival hasta ayer, Trinidad Jiménez.

Según fuentes de la dirección federal del PSOE, Zapatero se puso en contacto con Gómez para trasladarle su enhorabuena. Intercambiaron palabras «cordialísimas» y reafirmaron su voluntad de mantener una estrecha relación para conseguir que Gómez gane los comicios autonómicos de 2011.

sondeos

El veredicto de la militancia desoye los sondeos que manejaba Ferraz, según los cuales Jiménez tenía más posibilidades de arrebatar Madrid a Esperanza Aguirre. Esos sondeos llevaron a Zapatero a pedir a Gómez, sin éxito, que diera «un paso atrás».

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