Era una pelea de David contra Goliath, reconocía en los días previos el propio alcalde gasteiztarra Patxi Lazcoz. Y David volvió a ganar. La ``marca'' Barcelona no pudo cerrar el paso a Gasteiz como Capital Verde Europea. Seis eran las urbes que habán conseguido llegar hasta esta finalísima de Estocolmo: además de Gasteiz, estaban Barcelona, Nuremberg, Nantes, Malmö y Reikiavik. Como unos Juegos Olímpicos, pero sólo con el anillo verde. Y el de la capital alavesa tiene 583 hectáreas.

Las dos primeras y la francesa partían como favoritas. Por la mañana, sus respectivos alcaldes tuvieron la última oportunidad de convencer -si no lo tenía ya decidido- al jurado y muchos temían el peso de Barcelona, por su enorme proyección internacional. Los defensores de la opción alavesa veían más un peso político en esa decisión que una argumentación ``verde''. Temores que, al final, no se cumplieron y los «zorionak Gasteiz» se multiplicaron.

Lágrimas y felicitaciones

Los nervios en la delegación gasteiztarra -compuesta por todos los grupos políticos del Ayuntamiento- se alargaron hasta pasadas las 22.00, cuando la cena de gala dio paso al fallo del jurado. El comisario europeo de Medio Ambiente lo anunciaba: «And the winner of the title as European Green Capital 2012 is... Vitoria-Gasteiz».

Las lágrimas de muchos de los asistentes llegados desde la capital alavesa no se hicieron esperar. Patxi Lazcoz recogía el ansiado galardón y se lo dedicaba a sus dos predecesores, José Ángel Cuerda -la primera llamada telefónica que realizó- y Alfonso Alonso, a los técnicos municipales y a «la fantástica ciudadanía vitoriana».

Minutos después, en Radio Euskadi, el propio alcalde aseguraba que era el premio «a 30 años de políticas sostenibles», remarcando su proyección internacional, «alcanzando un rango que creo que nos merecíamos». Un premio que, añadió, traerá para la ciudad «365 maravillosos días» en 2012.

¿Y ahora qué?

La pregunta ahora es: ¿qué supondrá esto para la ciudad? Lo primero, ``vender'' ciudad, portar una marca con la cual pueda ligarse a Gasteiz más allá de «tener un festival internacional de jazz y estar en el norte de España», como acertaba a señalar en el mapa el alcalde de Estocolmo. Igualmente, la ciudad será sede de eventos internacionales que tengan que ver con el medio ambiente y muchas delegaciones del mundo entero la visitarán para saber qué y cómo se llevan aquí estas premiadas políticas sostenibles.

El ecoturismo es otro de los empujones de los que se beneficiará la ciudad, sobre todo para una urbe como la gasteiztarra que publicita su atractivo urbano, arquitectónico y cultural a falta de otros recursos más emblemáticos. Pero sobre todo, el mayor impulso, según los observadores, es que las políticas locales en esta materia se verán reforzadas y relanzadas y otro tanto se supone que ocurrirá con la concienciación de la propia ciudadanía.

Ahora, tras el logro obtenido por la capital alavesa, le toca el turno a Donostia, que espera la final para la nominación de Ciudada Europea de la Cultura 2016. Gasteiz ya le ha indicado el camino.