CRíTICA cine
«Louise-Michel» Tiempos de crisis
Koldo LANDALUZE
Ya se sabe que la comedia es el más difícil de los géneros y si las intenciones de la película van encaminadas hacia los senderos del humor negro y los grotesco, ese riesgo puede llegar a ser suicida. En esta su tercera experiencia cinematográfica compartida, Benoît Delépine y Gustave Kervern apostaron, lo digo en pasado por que este mismo año estrenaron la cuarta –“Mamuth”–, por un proyecto que, a primera vista no gustará a todos los públicos que deseen buscar una carcajada por la vía rápida. Los autores de “Avida” no han encontrado mejor modelo para esta historia que apostar por el riesgo incalculable, hacer el triple salto mortal sin red, y ser fieles a sus intenciones a pesar de que el patio de butacas se pregunte en más de una ocasión que demonios está ocurriendo ante sus ojos. El punto de partida es suculento: Un buen día, las trabajadoras de una empresa descubren que se han quedado en la calle y para poner remedio a este desorden, deciden reunir sus paupérrimas cuentas corrientes para contratar a un asesino a sueldo que elimine a su despreciable jefe. Soluciones drásticas para tiempos enloquecidos de crisis.
Delépine y Kervern no son nuevos en este tipo de situaciones, les gusta el gag visual y el humor de corte minimalista. En su filmografía también topamos con un estilo de humor que coquetea con lo bizarro y fieles a su discurso, perseveran en su empeño por dotar a esta película de un crescendo dramático-cómico que culmina en un incomprensible final que contrasta con lo anteriormente visto. Dejando a un lado este extraño freno y marcha atrás con el que culmina “Louise-Michel”, destaca el singular microcosmo de personajes que pasea por esta propuesta en la que los freaks, en honor a Tod Browning, se reúnen de nuevo para vindicar sus derechos mancillados. En ese sentido, resulta obligado subrayar la gran labor interpretativa de una Yolande Moreau, bien secundada por Albert Dupontel, que se basta y sobra para acaparar toda la atención de nuestros aturdidos sentidos.