La Euskal Mendizale Federazioa decidió llevar el Campeonato de Euskadi de Escalada en su modalidad de dificultad a tierras navarras. Y, la verdad sea dicha, dio en la diana. Por aquello de las divisiones territoriales, los escaladores navarros sin licencia de la EMF no pudieron participar en la cita más importante del calendario competitivo de esta federación, pero sí en el Open que con buen gusto y criterio presentó en la competición del domingo.

Y también se agradeció el hecho de organizar el campeonato en un rocódromo que se echaba en falta: el de Rocópolis (Berriobeiti). Sí, hacía ya unos cuantos años que no se disputaba una prueba de este calibre en Rocópolis. Y, tal y como nos aseguraron muchos competidores, la decisión adoptada fue muy adecuada teniendo en cuenta que tiene una de las mejores estructuras para que los escaladores midan sus fuerzas.

Y la guinda a este positivo contexto la puso una «cordada» que no debe fallar en este tipo de eventos: competidores y público.

Los primeros, los participantes del Campeonato de Euskadi (y del Open), llegaron muy motivados. Para ellos es la fiesta de la competición de dificultad, y, en gran medida, lo dieron todo no sólo para superarse sino también para ofrecer un bonito espectáculo. Una amalgama muy colorida de edades, y es que durante la jornada de ayer se pudieron ver buenos aprietes tanto en las diferentes categorías juveniles (sub-16, sub-18 y sub-20) como en seniors. En total, 62 inscritos. Y la respuesta del público, pues más de lo mismo. A diferencia de otras ediciones, el Campeonato de Euskadi esta vez se disputó en domingo. Y la verdad es que sobre todo a las finales de la tarde se acercó un buen número de espectadores; muchos de ellos familiares de los competidores juveniles.

Y la fiesta del campeonato comenzó a la mañana con las clasificatorias. Dos vías para cada categoría que se escalaron al flash. En esto también acertaron los organizadores, ya que los competidores pudieron escalar metros.

Las finales se desarrollaron a partir de las 5 de la tarde. Para esta ocasión, como es habitual, una vía y a vista. Los equipadores, Jon Gurutz lazkoz y Gotzon Gardeazabal, acertaron con sus propuestas. Para que la prueba no se alargara demasiado, escalaron simultáneamente todas las categorías excepto los sub-20 y seniors chicos.

Finales abiertas

En la categoría sub-16 chicas, Mirian Mulas dejó claro que era la más fuerte, ya que fue la única en encadenar la vía. De esta forma, Mulas se hacía con el triunfo seguida de Jone Ugartemendia y Maitane Irastorza. La navarra Andrea de Goñi fue segunda pero competía en el Open. En chicos, la txapela de la EMF se la llevó Beñat Muruaquien también encadenó la vía. Era su primera participación en una competición y demostró un gran estado de forma; segundo fue Beñat Arrieta y tercero Jon Arangun. El navarro Jon López fue el mejor del Open.

El primer puesto en sub-18 féminas lo selló Lara Larrañaga, única competidora en el Campeonato de Euskadi. Segunda fue Ilargi Pérez, pero puntuó en el Open. Kepa Bruña fue el único en hacer top en chicos, y de esta forma se llevó el campeonato. Bonita actuación de Omar Bel Alí, segundo, e Iñaki Velasco, tercero.

En sub-20, Jone Martìnez fue la única competidora. Y en chicos, Jonbe Agirre fue el mejor seguido de Jon Ander Bravo e Iñaki Viejo.

Estas eran las clasificaciones de los mejores en las diferentes categorías juveniles. Estos jóvenes demostraron una vez más que están a un nivel interesante. Por lo menos se nota el trabajo que se está llevando a cabo, entre otros, en el Debagoieneko Eskalada Taldea, el Fortuna y el Cetro de Tecificación de Gasteiz.

La categoría senior es la que depara la mayor atención y, en esta ocasión, los «mayores» realizaron un bonito trabajo. Seis finalistas tanto en chicas como en chicos.

Tal y como se esperaba, Itziar Rodríguez era la favorita de esta prueba. Y no falló. Suele ser habitual en las finales de la Copa de España, y esa experiencia se dejó notar. Con soltura, pero con algún que otro problemilla, encadenó la vía de la final. No fue la única en hacer top, ya que la veterana y gran competidora Esther Cruz hizo lo mismo. Pero no hubo superfinal, y es que Rodríguez hizo mejor clasificatoria que Cruz. Y la que tampoco se quedó atrás fue otra veterana: Ane Hernani. Se subió al tercer cajón del podio. Tenemos que resaltar la participación y el empuje de estas dos veteranas, sobre todo si tenemos en cuenta que en Euskal Herria hay un buen número de chicas con nivel que pueden dar mucho juego en este tipo de campeonatos.

Y para terminar la crónica, un hueco para los senior chicos. En esta edición no se presentaron muchos; sólo 12. A pesar de todo, se pudieron ver unos duelos muy atractivos.

En una vía de pura continuidad, Mikel Ziarrusta dejó claro que se maneja muy bien en este estilo. Para llegar a la cadena le faltaron unas cuantas presas, pero se llevó la txapela. Gorka Karapeto también estuvo fino, lo intentó, pero finalmente se tuvo que conformar con la segunda plaza. Y Mikel Odriozola tuvo el honor de colarse en la tercera posición de este Campeonato de Euskadi.