El presidente de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD), Mohamed Abdelaziz, advirtió ayer de que la muerte del adolescente saharaui Elgarhi Nayem, tiroteado por agentes marroquíes el domingo, constituye una «violación flagrante y grave» del alto el fuego en el Sahara «perpetrando un crimen abyecto contra civiles saharauis indefensos». En una carta al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, alerta sobre «esta nueva escalada».

En Euskal Herria, se realizaron varios actos de protesta por la muerte del joven saharaui. En Donostia, 120 personas participaron en la concentración convocada por Ya-lah Gazte Ekimena para denunciar «el silencio y la complicidad asesinas» de la comunidad internacional y, en concreto, del Estado español, y mostrar su desprecio a Rabat.