CRÍTICA cine
«Ga´Hoole: La leyenda de los guardianes»
Koldo LANDALUZE
A la espera de lo que pueda dar de sí la accidentada y más que ansiada “El Hobbit”, la industria cinematográfica persevera en su empeño por encontrar sucedáneos con los cuales seguir la estela económica que legó el visionario Peter Jackson con su referencial trilogía de “El Señor de los Anillos”. Hay mucho de este intento en “Ga´Hoole: La leyenda de los guardianes”; una especie de variante zoomórfica de aquella odisea fantástica que J. R. R. Tolkien ambientó en la Tierra Media. La principal singularidad y reclamo de este proyecto ha radicado en descubrir que detrás de la cámara se encuentra Zack Snyder, un cineasta cuyos tres primeros filmes (“Amanecer de los muertos”, “300” y “Wachtmen”) le convirtieron en un autor de prestigio y abonado a filmes de alto riesgo visual y épica salvaje. En su nueva película, ha optado por mostrarse muy moderado, lo cual puede deberse al infantiloide y muy moralizante original literario de Kathryn Lansky que sustenta el entramado narrativo de la película. Lo cierto es que no resulta fácil tropezar con el brío narrativo de Snyder a lo largo de un metraje en el que se hace especial hincapié en unos discursos seudofilosóficos que son para agarrar por las puntas y nos hablan del devenir de la vida y el eterno discurso entre quiénes son los Buenos y los Malos.
Sólo cuando las aves que habitan esta fabula animada en tres dimensiones emprenden el vuelo y afilan sus picos y garras para entablar los vertiginosos duelos aéreos que animan la velada, se asoma tímidamente el autor que adaptó para la pantalla los cómics de Frank Miller y Alan Moore. El empaque visual, el tratamiento más que correcto del 3-D y las sensaciones de vértigo que nos legan el visionado de las caídas en picado, conforman lo más destacable de esta producción familiar al que le sobra demasiada palabra y espiritualidad. Como se suele decir en estos casos, quizás se trate de una película demasiado infantil para los adultos y demasiado adulta para los críos.