El Gobierno de Lakua aprobó ayer el proyecto de presupuestos para 2011, que ascenderá a 10.549,5 millones de euros, un 2,3% más que los de este ejercicio. El proyecto fue aprobado en un Consejo de Gobierno extraordinario y el texto se remitirá al Parlamento de Gasteiz para su tramitación legislativa. Las cuentas serán aprobadas por la Cámara previsiblemente a finales de diciembre.

En este proyecto presupuestario pactado entre PSE y PP se contempla un nivel de endeudamiento de 1.017 millones de euros, 900 millones menos que en 2010, y también se da el visto bueno a un paquete de medidas extraordinarias dotado con 249 millones de euros, con cargo a las cuentas de 2010 pero que en su mayoría se ejecutarán en 2011.

El consejero de Economía y Hacienda, Carlos Aguirre, afirmó que éstos son unos presupuestos «austeros» elaborados para salir de la crisis. Las cuentas se han diseñado con una previsión de crecimiento económico para 2011 del 1,4%.

Por su parte, la portavoz de Aralar en el Parlamento, Aintzane Ezenarro, criticó que el texto haya sido previamente pactadas con el PP. Por ello, censuró el «escaso margen de maniobra que tiene el Gobierno a la hora de establecer los presupuestos».

El consejero de Economía también hizo referencia al pacto entre el PSE y el PNV para aprobar los presupuestos de las diputaciones de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa. Aguirre rechazó que exista un «acuerdo formal» pero reconoció que el PSE «favorecerá» la aprobación de esos proyectos, lo que significa que «está dispuesto a negociar».

La versión de Aguirre no es contradictoria con la que trasladan los dirigentes jeltzales, aunque éstos ponen más énfasis en dar por cerrado el acuerdo. Por ejemplo, el diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano, aseguró ayer mismo que él y sus homólogos de Bizkaia y Gipuzkoa acordaron con Lakua, en conversaciones «al máximo nivel», que PNV y PSE facilitarían la aprobación de los presupuestos autonómicos y forales. El PP, por su parte, lamentó un acuerdo que «reproducirán los errores» de los últimos años.