Los centímetro y los kilos son aspectos fundamentales en el baloncesto, pero afortunadamente para el Baskonia no lo son todo. Perdida la batalla interior con las faltas de Barac, la inmadurez del debutante Musli y la ausencia de Rancik por lesión, Ivanovic asumió el riesgo de jugar con cuatro «pequeños» el último cuarto de un complicadísimo partido y el equipo gasteiztarra lo sacó adelante con mucha más solvencia en el marcador de la vivida en el parqué.

En una situación de máximo riesgo, el termómetro azulgrana Mirza Teletovic entró en ebullición -asumiendo incluso la defensa de Batista-, jugando de cuatro San Emeterio tomó el protagonismo que se le había negado hasta entonces, Ribas recuperó la importancia que parecía haber perdido y el equipo gasteiztarra solventó la papeleta ante un rival que demostró que su posición en la tabla no responde a la casualidad.

La inhabitual respuesta de Dusko Ivanovic no consiguió mitigar la sangría interior que produjo el Fuenlabrada -capturó 11 rebotes más-, pero fue el único momento en el que el Baskonia impuso su ritmo de juego y pudo sacar del partido a un Fuenlabrada en el que el trabajo de scouting de Samaniego se hizo notar de lo lindo.

Problemas dentro

El partido vino a corroborar la sensación de los problemas que sufre Stanko Barac ante pívots duros y fuertes. La pareja Batista-Ayón cerró su aro y percutió el contrario desde el inicio y, gracias a un fantástico juego colectivo, Fuenlabrada sacó de rueda al Baskonia desde el salto inicial. El equipo gasteiztarra no se encontraba nada cómodo, los triples no entraban -Ribas puso fin a una racha de 0/9- y se mostraba incapaz de tomar la delantera en el marcador.

Lo hizo puntualmente mediado el segundo cuarto, 34-33 tras canasta de Logan, pero una zona de Maldonado volvió darles la iniciativa, 40-45 al descanso. En la reanudación, Batista continuó poniendo la puntilla al buen trabajo colectivo de los de naranja y la cuarta falta personal de Barac aumentó la angustia. Afortunadamente, los azulgranas supieron hacer de la necesidad virtud y remontaron.