AIG devolverá al Gobierno de EEUU 37.000 millones del rescate de 2008
Hace dos años, American International Group (AIG), la que entonces era la primera aseguradora del mundo, recibió 182.000 millones de dólares del Gobierno de Estados Unidos, en aquellos días en manos de George Bush, para evitar su colapso. Aquella operación de rescate con dinero público fue fuertemente criticada por la sociedad estadounidense. Más de dos años después, AIG ha anunciado que devolverá parte de lo recibido, aunque aún le queda mucho por pagar.
GARA
La aseguradora estadounidense American International Group (AIG) anunció ayer que, tras la venta de dos de sus subsidiarias, pagará al Gobierno de EEUU 37.000 millones de dólares del rescate financiero del que se benefició en setiembre de 2008.
AIG indicó en un comunicado difundido por la agencia Efe que ya ha completado la venta de American Life Insurance Co (ALICO) a MetLife por 16.200 millones de dólares, que incluyen 7.200 millones en efectivo y el resto en acciones de la otra firma. La aseguradora estadounidense también cerró la semana pasada otro acuerdo de adquisición pública en Hong Kong de su unidad de seguros en el extranjero, AIA Group, por la que ha obtenido 20.510 millones de dólares en efectivo.
La firma explicó que las cantidades obtenidas de esas dos operaciones servirán para pagar a la Administración de Estados Unidos parte de la ayuda pública de la que se benefició durante la crisis financiera que se desencadenó en aquel país -y que acabó por afectar a todo el mundo- hace dos años a causa de las hipotecas «basura». AIG también indicó que podría vender los títulos de MetLife y usar lo que obtenga para seguir pagando su deuda con el Estado.
Recibió 182.000 millones
Esta aseguradora, que fuera la mayor mundial y también una de las empresas más afectadas por la crisis hace dos años, se benefició de las medidas de rescate establecidas por el Departamento del Tesoro de EEUU para evitar su colapso en setiembre de 2008. Recibió entonces unos 182.000 millones de dólares a cambio de controlar alrededor del 80% de la aseguradora.
«Prometimos a los contribuyentes de Estados Unidos que les devolveríamos el préstamo y con las operaciones de AIA de la semana pasada y ahora con la de ALICO estamos cumpliendo nuestra promesa», dijo el presidente y consejero delegado de la firma, Robert Benmosche, en la nota de prensa.
El pasado 30 de setiembre la aseguradora presentó un plan para acelerar y completar, antes de que acabe el primer trimestre de 2011, la devolución de todas las ayudas recibidas de la Administración a raíz de su criticado y multimillonario rescate. Como parte de ese plan, AIG anunció la conversión de las acciones preferentes que tiene la Administración en 1,65 billones de títulos comunes que entregará al Tesoro, para que, con el tiempo, pueda venderlos en Bolsa y reducir progresivamente su participación en la aseguradora.
Hasta la presentación de ese plan, AIG había devuelto parte de los fondos a través de la venta de activos y filiales, pero se calcula que aún debe más de 130.000 millones de dólares a través de distintos instrumentos financieros, entre ellos 49.000 millones en préstamos al Tesoro.
La aseguradora de bonos estadounidense Ambac Financial Group ha anunciado que no cumplirá con el pago de los intereses previstos de un crédito con vencimiento en 2023, y que podría ampararse en la ley de quiebras.
El mercado mira con incertidumbre la próxima reunión del Comité de Mercado Abierto de la Reserva Federal (FOMC) de Estados Unidos, que se celebra hoy y mañana, donde está previsto que el presidente de la Fed, Ben Bernanke, anuncie un nueva inyección de liquidez en la economía estadounidense cuyo importe es aún una incógnita, pero que, dados los últimos datos macroeconómicos y los buenos resultados empresariales, es probable que sea menor de lo inicialmente planteado por la institución, según informó ayer la agencia Europa Press.
El diario «The Wall Street Journal» ha publicado recientemente que la Fed probablemente dará a conocer un programa de compra de bonos del Tesoro valorado en unos pocos cientos de miles de millones de dólares para los próximos meses, lo que contrasta con los dos billones de dólares (1,4 billones de euros) que empleó en el primer programa de compra puesto en marcha durante la crisis financiera. Una encuesta realizada por el rotativo a un grupo de economistas esperaba que la Fed invirtiera 250.000 millones de dólares (180.356 millones de euros) por trimestre en la compra de Bonos del Tesoro, que se prolongaría hasta mediados de 2011. En general, los analistas esperan que la cantidad final destinada ronde el billón de dólares. GARA