Abarrotado se vio ayer el teatro Leidor de Tolosa, donde todas las agrupaciones corales que se han visto premiadas en esta 42 edición interpretaron las canciones con las que han destacado este año. Este multitudinario concierto arrancó con la actuación de la Salt Lake Choral Artists Chamber Choir estadounidense, ganadora del Premio del Público. Nadie entonces pudo predecir que los miembros de este conjunto serían unos de los protagonistas más destacados de la jornada ya que, además de ese primer galardón, se vieron premiados con el primer puesto en otras cuatro categorías. Es decir, de los siete premios que se repartieron ayer en la final del Certamen Coral de Tolosa, cinco fueron a parar en manos de este conjunto (Premio del Público, Grupos Vocales en Música Sacra, Grupos Vocales en Música Profana, Voces Mixtas en Polifonía y Voces Mixtas en Folklore).

El palmarés de esta 42 edición estuvo especialmente marcado por la presencia estadounidense, ya que otra agrupación, University of Delaware Vocal Group, se vio premiada también en cuatro categorías. En todas ellas fue reconocida con la segunda posición excepto en Folklore, donde se tuvo que conformar con un tercer puesto ex aequo con las corales Hodeiertz y Oroith, de Tolosa y Ordizia respectivamente, que se presentaron al concurso de forma conjunta. Su participación fue premiada gracias a la interpretación de la canción “Ohiu Hau”, compuesta por David Azurza, y en la que la coral, ataviada con trajes típicos de Euskal Herria, entrelazó sus voces con ritmos de percusión realizados con los palos de pastoreo que portaban algunos de los integrantes.

El momento más emotivo de la cita llegó al final, con la entrega de los dos últimos premios. En Voces Mixtas de Folklore, Salt Lake Choral Artists Chamber Choir recibió su quinta txapela de la edición e interpretó “Segalariak”, de Josu Elberdin, siendo obligatorio cantar una canción en euskara en esta categoría. La composición, que habla sobre la vida de los segalaris de Tolosa, emocionó al público asistente, sobre todo cuando una de sus integrantes se arrancó con un atrevido irrintzi, motivo por el que casi la sala se puso en pie.  

El clímax de la final de esta 42 edición, aunque los motores ya estaban lo suficientemente calientes con las actuaciones precedentes, llegó con la entrega del premio más importante del certamen, el Gran Premio Kutxa, gracias al cual los ganadores de este galardón obtuvieron el pase para el campeonato europeo coral que se celebrará en 2011 también en Tolosa. Esta vez, el pase para esta cita fue a parar en manos de la coral infantil húngara –formada íntegramente por mujeres– Cantemus, con la canción Tancnota, de Zoltan Kodaly.
La final concluyó con el tradicional “Agur Jaunak” cantado por el público a los ganadores del certamen y dirigido por Xabier Sarasua, eso sí, no sin antes escuchar el estallido de gritos que protagonizaron las cantantes húngaras como muestra de su euforia al ver su trabajo premiado con la nominación para el campeonato europeo de 2011.