Uno de los ataques hacia una persona que más miedo causa al director Miguel Ángel Vivas es el allanamiento de morada. Y ese precisamente es el tema de la película que se proyectará hoy a las 17.00 horas en la Semana de Cine Fantástico y de Terror de Donostia, «Secuestrados», donde una familia se muda a un barrio residencial de las afueras de cualquier ciudad grande y la primera noche es atacada por tres hombres encapuchados; dos albaneses y un español.

Rodada en dos semanas y acabada hace apenas tres meses la cinta contiene solamente doce planos secuencia; es decir, la película es la suma de doce secuencias filmadas en continuidad, sin corte alguno entre planos. Así, el director consigue que el espectador sea incapaz de salir de la historia, en este caso un violento secuestro.

Aunque en el clímax de la película, y para añadir más emoción, el director optó por utilizar otro método. Partió la panatalla en dos para poder continuar con el plano secuencia pero colocando al espectador ante dos situaciones diferentes del secuestro. Así, además, da la oportunidad de posicionar al espectador como montador de la historia, siendo él quien elige a donde mirar y cuándo hacerlo, aunque la cinta da unas pistas para mirar en la dirección más adecuada.

El final inesperado fue una decisión «moral» que tuvo que tomar Vivas aun siendo consciente de lo arriesgado que era. Y es que, no quiso enviar el mensaje equivocado: «No voy a contarlo al estilo Hollywood», sentenció.

La Bestia y un repaso

Por otro lado, la Semana de Terror aprovecha para presentar diferentes libros unidos por el tema principal de esta edición: el cine de terror y la fantasía. Así, ayer se presentaron dos publicaciones: «La bestia en la pantalla. Aleister Crowley y el cine fantátisco» y «Profanando el sueño de los muertos».

El primero es un monográfico sobre Aleister Crowley, un ocultista, místico y mago ceremonial de principios del siglo XX que fundó la filosofía religiosa de Thelema. En él se enseña el carácter de Crowley, además de añadir alguna anécdota de actores conocidos. Según explicó Jesús Palacios, coordinador del libro, este personaje, aunque no estuvo nunca ligado al mundo cinematográfico, ha dejado un gran legado en obras de diferentes cineastas thelemitas fueran confesos o no. «Crowley percibía lo invisible, tenía contacto permanente con lo extrasensible», explicó Frank G. Rubio, uno de los autores del libro.

Por su parte, Ángel Sala, director del Festival de Sitges, presentó su libro titulado «Profanando el libro de los muertos», donde se hace un repaso a la filmografía del cine fantástico realizado en el Estado español. En su opinión, éste género es «muy despreciado por la crítica en este país».

«El libro intenta dar un paseo cronológico por el genero», explicó Salas. Y es que, a su parecer, falta una revisión a la memoria histórica del cine. Por eso, además de hablar sobre películas como «Marcelino pan y vino», la que es la primera película de zombies española en su opinión, también hace un repaso por la actualicad cinematográfica del género fantástico. Además, aborda la eterna tensión entre los que quieren cine hollywoodiense y los que prefieren, al igual que Sala, «el cine con raíces hispánicas».