GARA > Idatzia > Iritzia> De reojo

Raimundo Fitero

Volar

Si no tienes miedo a volar, ves un telediario y te conviertes en un paranoico; te puede entrar terror hasta con los aviones de papel. Cuando se encadenan varias circunstancias con los pajaritos de hierro como protagonistas, se crea una auténtica psicosis. En medio del caos informativo en que nos asfixian, poniendo en el mismo rango una anécdota que una catástrofe, lo de los aviones se coloca en un terreno intermedio, ya que todo acaba siendo una parte de nacionalidades. Es decir, los aviones caídos tienen más o menos importancia dependiendo de los ciudadanos con pasaporte propio del medio de comunicación que hayan fenecido. Y no digamos en las televisiones de proximidad, las que por mucho que se empeñen, no tienen pasaporte identitario, entonces la «patria chica» que tanto usaba Franco se agranda y se convierte en noticia por activa o por pasiva. Porque sí hay un ciudadano de la región de Murcia, por poner un ejemplo, entre los fallecidos o porque no hay ninguno.

Lo cierto es que los aviones sufren accidentes, que en paralelo se coloca una extraña advertencia sobre los motores de uno de los aviones de pasajeros de mayor capacidad de transporte de seres humanos, un Airbus que se convierte en portadas de periódicos, en apertura de noticiarios, porque se entiende que ese fallo puede ser la ruina, otra ruina, para el consorcio de empresas europeas que lo fabrican. O sea, que la seguridad importa, pero relativamente, porque sin economía parece no existir tanto aprecio a la seguridad. Y la competencia, no se olvide, es una empresa norteamericana. No insinúo nada.

Pero es que se han producido dos accidentes y medio consecutivos, justo en un momento en donde en cada noticiario se nos informaba de unos paquetes bombas que iban con destinos variados, se nos ofrecían imágenes de la detención de dos jóvenes griegos, «de extrema izquierda», se nos señala para su estigmatización, y todos los envíos, o intentos de bombas o falsos avisos se producen, siempre, en aviones, porque es la imagen del cambio político, de la locura actual: los pájaros de hierro gemelos comiéndose las torres gemelas. El principio de este fin de época económica. Volare, volare.

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo