ARRATE 29

TOLEDO 28

Fue sobre la campana y con bastantes más apuros de los previstos, pero el Arrate recibió el balón de oxígeno que necesitaba. El deportivo, se entiende, porque el otro, aunque las previsiones parecen halagüeñas, sigue haciéndose desear.

Nadie esperaba que la cita fuese un trámite, por mucho que el Toledo llegase a Ipurua ostentando un triste récord. Era, y sigue siendo, el único equipo de Asobal que mantiene a cero su casillero de puntos. Pero los albiazules, con tres derrotas consecutivas a sus espaldas y ni un solo punto celebrado ante su afición, ya habían sufrido algún batacazo previo, así que las confianzas estaban descartadas.

Más aún con el arranque de partido que se vivió en Ipurua, donde los visitantes empezaron mandando. Y siguieron, con ventajas que se fueron hasta los tres goles, hasta bien entrado el primer tiempo. La reacción del Arrate en los diez minutos previos al descanso, con un parcial de 6-0, devolvió la tranquilidad al pabellón y la ventaja a los anfitriones (13-10 al descanso).

Las buenas sensaciones se confirmaron en la reanudación. El Arrate mantuvo su renta e incluso la amplió hasta los cinco goles. Hasta que las malas noticias volvieron a llegar. Primero con la lesión de Sever, que ya se había perdido los primeros partidos de la campaña y que se resintió de la misma rodilla. Y después, con la reacción del Toledo, que recuperó el tono en el peor momento, volteando el marcador con un parcial de 0-5 para volver a ponerse por delante. A cuatro minutos del final, el público albiazul mascaba la tragedia con el 26-27 del luminoso. El arreón final y, sobre todo, los goles de Rédei, Tokic y Beljanski permitieron que todo quedara en una broma de mal gusto.

El Arrate ya tiene su primer triunfo como local, que le permite abandonar momentáneamente el descenso y que se agradece especialmente en vísperas de visitar al Zaragoza.

San Antonio

San Antonio, por otro lado, visita hoy al Naturhouse La Rioja (18.30), un rival directo al que intentará sorprender para prorrogar su buen momento de juego y resultados.

La gran novedad en la convocatoria pasa por la presencia del central Víctor Álvarez, que viajará hoy a Logroño junto a sus 14 compañeros, aunque Juanto Apezetxea esperará hasta el último momento para decidir si juega o le reserva para el próximo compromiso.

El técnico antoniano aseguró viajar «con ese punto de tranquilidad que nos dan los resultados. Estamos haciendo las cosas bien y podemos sacar algo positivo, aunque no olvidamos que ellos quedaron quintos el año pasado y que Logroño es una plaza difícil».