Habrá que ver lo que va a pasar esta tarde, a partir de las 14.00, pero todo apunta a que muy mal le deben ir las cosas a Fernando Alonso para no hacerse con su tercer entorchado mundial. Al asturiano le basta con finalizar primero o segundo para ganar el Mundial, o mantenerse en el podio mientras no sea Mark Webber quien gane la prueba de Abu Dhabi. Después de lo visto en los entrenamientos oficiales de ayer, Sebastian Vettel es el principal rival del hispano, mientras que el otro Red Bull, el australiano Mark Webber, necesita poco menos que un milagro.

Vettel conquistó su décima pole position dando una sensación de superioridad aplastante. El piloto alemán fue el mejor en las sesiones de entrenamientos libres, y en los oficiales no hizo sino confirmar semejante sensación de dominio.

Mientras, su compañero Webber siempre fue inferior, pero no sólo respecto al teutón, sino respecto a un enrabietado Hamilton, mientras que casi siempre marcó mejores registros que Alonso.

Pero todo se le puso en contra al oceánico, ya que mientras Hamilton se incrustaba en la primera línea, Alonso se colaba en la segunda fila -la parte limpia- tras una gran última vuelta. Asimismo, el aún vigente campeón Jenson Button también mejoraba a Webber y relegaba al piloto de Red Bull a una quinta plaza que no le sirve de nada y que, por ende, lo obliga a arriesgar.

«Aún no ha cantado la gorda»

Decepcionado pero no rendido, Mark Webber avisa que esta tarde dará todo lo que tiene para hacerse con un entorchado que, contra viento y marea, se ha trabajado durante toda la campaña. «Aún no ha cantado la gorda», dijo, gráficamente.

«No luché por el quinto puesto; es decepcionante. Pero todavía hay un largo trecho que recorrer. La gorda todavía no ha cantado. Me gustaría haber ido más allá, pero no tenía el ritmo. Tenemos que llegar al final de la carrera; todavía pueden pasar muchas cosas. El campeonato no se ha decidido».

Respecto a los motivos por los que rindió tan poco, el australiano declaraba que «creo que no tuve el agarre que tuvieron los demás tipos; tengo que mirar dónde he perdido tiempo. Tan sólo tenemos que hacer el mejor trabajo que podamos; es una carrera larga. Estamos en la brecha y eso es lo importante».

Con su flema habitual, Fernando Alonso no ocultaba la alegría de una fructífera jornada de entrenamientos oficiales. El piloto ovetense confesaba que «ha sido un sábado excepcional, sobre todo por el peligro de tener los Red Bull primero y segundo y verlos en carrera poniéndonos difícil las cosas. Están primero y quinto, por tanto ha sido un gran paso para nosotros de cara al campeonato».

Vettel, por su parte, se centraba en sí mismo. «Creo que hemos logrado lo máximo que podíamos. Con suerte, tendremos una buena salida mañana y una buena primera vuelta, y después habrá una larga carrera; así que esperemos a ver qué podemos hacer», dijo.

Mientras, Hamilton podría erigirse en el juez del Mundial. Por lo pronto, el británico «amenazaba» con ir a por todas. «Son los demás los que tienen que preocuparse; no tengo que ser cauteloso en absoluto. No estoy concentrado en ganar el Mundial; simplemente estoy concentrado en ganar la carrera».