La situación era tensa ayer en Guinea Conakry, donde grupos de jóvenes se enfrentaron a las fuerzas de seguridad antes de que, avanzada la noche, se hicieran públicos los resultados oficiales, que dieron la victoria al histórico opositor Alpha Condé, con un 52,57% de los votos.

Tras 52 años de regímenes autoritarios, los guineanos tuvieron que decidir el 7 de noviembre en sus primeras elecciones entre el ex primer ministro Cellou Dalein Diallo, de 58 años y de etnia fulani -que logró el 47,48% de los votos-, y Alpha Condé, del grupo étnico malinke. Ambos fueron los más votados en la primera vuelta, celebrada el 27 de junio.

Denuncias de fraude

Mientras Diallo denunció la existencia de fraudes en esta segunda ronda electoral y solicitó posponer la publicación de resultados, su rival compareció ayer desde su domicilio para instar a la CENI a que proclamara sin demora los resultados.

Diallo advirtió de que, de no postergarse la proclamación de los resultados, no los reconocerá, al mismo tiempo que denunció fraude electoral en las circunscripciones de Siguira y Kouroussa, bastiones tradicionales de Condé, quien le respondió que «si queremos un Estado de derecho, tenemos que empezar por respetar el sufragio universal».

Entretanto, Conakry fue ayer escenario de violentos escenarios entre la Policía y los seguidores de Diallo, que convocaron una manifestación de protesta en esa capital.

Según distintas fuentes citadas por Efe, las fuerzas de seguridad dispersaron la manifestación con gases lacrimógenos, mientras que los manifestantes apedrearon a los policías.

Las mismas fuentes daban cuenta de otras manifestaciones en la localidad norteña de Labe, feudo de Diallo.

Tras el anuncio de los resultados se escucharon disparos en distintas zonas de Conakry.