Campeonato del cuatro y medio
Nada de «final anticipada»
En los últimos cuatro años de la jaula los ganadores de la primera jornada no se han enfrentado en la final.
Jon ORMAZABAL
Aunque el entradón que presentó ayer el Labrit para una elección de material -muchos festivales la quisieran para sí- parece decir lo contrario, Juan Martínez de Irujo y Abel Barriola eludieron en todo momento referirse al partido que les enfrentará el sábado como una «final anticipada» e incluso se mostraron reacios a dotar a este choque de esa capacidad resolutiva en sus aspiraciones a la final que muchos le han dado.
Tanto el de Ibero como el de Leitza reconocieron que ganar el segundo punto sería un gran paso adelante pero ambos recordaron casos en los que dos victorias no fueron suficientes. En su última participación, en 2008, el propio Martínez de Irujo dejó sin opciones de final a Abel Barriola, tras un cuádruple empate a dos victorias en el que el zaguero se quedó fuera por sólo cuatro tantos.
El campeón manomanista, por su parte, se acordó de Titín III el año pasado, cuando de nuevo él mismo lo dejó fuera de la final en el tercer partido, después de que el de Tricio hubiera ganado los dos primeros partidos. Pero es que además, si echamos un pequeño vistazo a la historia, desde que Aimar Olaizola y Xala vencieran en el primer partido de la liguilla de 2005, los últimos vencedores de los primeros partidos de la liguilla de semifinales, como en este caso Barriola y Martínez de Irujo, no han vuelto a verse las caras en la final.
Al margen de estadísticas y precedentes que de poco valen a la hora de la verdad, el material, a priori no parece que vaya a ser excusa en el choque del sábado, a pesar de que las condiciones especiales del Labrit creen siempre alguna duda. Fiel a su tradición, Irujo no habló del material y Barriola señaló que se quedó con una «buena sensación. Las dos mías y una de las que ha elegido él son muy parecidas. Yo he encontrado lo que quería y espero que Juan haya encontrado lo suyo. No obstante, en este frontón siempre te queda la duda de que la pelota coge un poco de vuelo, pero esperemos que eso no ocurra».
Llevar la iniciativa
En cuanto a sus previsiones de partido, siendo dos pelotaris de estilos tan diferentes sobre la cancha, ambos mostraron su voluntad de imponer su ritmo y de llevar la iniciativa.
«Es un partido muy complicado, sobre todo porque siempre buscamos llevar la iniciativa, e imponer cada uno nuestro ritmo. Pero eso con Juan, no te voy a decir que es imposible, pero casi. Porque cuando juega mano a manos es él el que pone el ritmo, él es el que ataca y a los demás nos toca defender o jugar al contraataque», declaró un Barriola al que ser fiel a su juego de bote le ha sido muy beneficioso en este torneo.
No obstante, nada más terminar el partido ante Titín III, el propio Juan Martínez de Irujo reconoció que la jaula es la distancia en la que menos cómodo se encuentra. «Salí a jugar con mucha tensión, muy presionado y con ganas de ganar y así no se hacen las cosas. Luego piensas en frío y el juego de Augusto es muy malo, porque te mete en el txoko, luego te espera al aire y es muy difícil salir de allí. Te atrapa en la esquina y luego te corta de aire y es muy difícil salir de allí. Parece que Augusto no le da pero tiene otras virtudes de juego que lo hacen un rival muy complicado», analizó, ya mucho más tranquilo, el campeón manomanista.
El saque es otra de las principales virtudes de Abel Barriola que, sin ir más lejos, le hicieron mucho daño a Sebastien Gonzalez el pasado sábado en el mismo escenario. «Es un gran arma, lo que te alivia de Abel es que no busca el saque-remate y que, en teoría, con llevarla es más que contra otro rival que entra al aire. Estoy restando con confianza y espero que no me meta muchos», declaró el pelotari de Ibero que, pese a los momios de doble a sencillo a su favor que se manejan, ve el choque al 50%.