GARA > Idatzia > Kirolak> Baskonia

Euroliga Nueva derrota azulgrana

Vuelven a estancarse sin Barac

Las limitaciones interiores azulgranas volvieron a ser un lastre insuperable en un partido en el que los de Ivanovic llegaron a ir 11 puntos por delante en el último cuarto. El Baskonia se complica su futuro.

p035_f01_555x555.jpg

PARTIZAN 74

C.LABORAL BASKONIA 71

Jon ORMAZABAL

A pesar de que en la ACB se va parcheando la situación, la sangría interior que, hoy por hoy, arrastra el Baskonia es excesiva y ha colocado al equipo azulgrana en una situación límite tras volver a caer ante el Partizan en un partido que llegó a dominar por once puntos en el último cuarto. El rebote tras los dos tiros libres fallados por Kecman con 70-69 en el marcador no es sino el ejemplo más esclarecedor de una limitación que se acentúa en Euroliga.

Y es que, si el miércoles pasado fueron 22 los rebotes de más que capturó Zalgiris, ayer Partizan capturó 14 más que los vascos, un lujo que este Baskonia no se puede permitir. Porque el recurso de los pequeños puede ser eso, un recurso puntual, pero no puede ser el clavo al que agarrarse todos los días.

Porque además, los rivales saben bien que, sin una guía interior, el juego azulgrana se desequilibra. Jovanovic rotó y rotó a sus interiores hasta lograr eliminar a Barac por faltas y a Teletovic por agotamiento justo en el momento definitivo.

El Baskonia salió a la cancha muy serio y preparado a aguantar la presión de un Pionir impresionante. Barac fue el de las buenas noches y, desde el dominio del croata de ambas zonas, especialmente en rebote, y las penetraciones de San Emeterio en ataque, tomó enseguida el mando en el marcador, ya que al Partizan le costaba horrores ver el aro azulgrana. El aborigen Jawai fue prácticamente su única referencia en ataque y el temido primer cuarto finalizó con un favorable 18-25.

Muy irregular

Sin embargo, los minutos de banco a los que se vio sometido Barac tras su segunda falta y la entrada en cancha de un Marcelinho Huertas muy desafortunado, hicieron que el Baskonia perdiera el norte, y Partizan fue acercándose en el marcador y adelantarse 34-33 tras triple de Gist. Con Jawai, Katic y el atlético Gist, Jovanovic fue cargando el juego interior azulgrana, llevando el partido a su terreno y cargando de paso a Barac su tercera falta personal, lo que obligó a Ivanovic a dar minutos a Musli. Sin esa superioridad interior, el Baskonia perdió el equilibrio de su juego, se atascó mucho en ataque y Partizan lo aprovechó para irse al descanso 42-38.

La opción Bjelica volvió a mostrarse infructuosa en la reanudación e Ivanovic reaccionó volviendo a apostar por los pequeños y abrir el campo, con Huertas, Logan y San Emeterio.

Pese a los problemas que creó Vesely por su superioridad de centímetros, Mirza Teletovic ejerció de capitán, en ataque y sobre todo en defensa, y el Baskonia equilibró el marcador gracias también a los aportes de Logan en ataque.

El estadounidense fue de los pocos que supo ponerle pausa al juego al comienzo del último cuarto y, gracias a cinco minutos en los que Partizan, al estilo de Valencia, sólo fue capaz de anotar dos puntos desde el tiro libre, Baskonia adquirió una renta de hasta once puntos que parecía definitiva.

Sin embargo, la quinta falta personal de Stanko Barac hizo que la sequía cambiara de bando y a partir de entonces fue Baskonia el que se mostraba incapaz de ver el aro rival. Sin el croata en pista, el equipo se descompuso, Mirza Teletovic no pudo seguir aguantando el equipo y Kecman, el corazón serbio de Partizan, desaparecido hasta entonces, se encargó de rematar al equipo gasteiztarra, con un final especialmente significativo.

Y es que, cuando con el marcador 70-69, el escolta serbio falló dos tiros libres, los baskonistas cedieron un rebote ofensivo imperdonable, Kecman no falló en la nueva oportunidad que le concedieron, a San Emeterio le pitaron unos pasos muy rigurosos y el primer puesto escapó casi definitivamente. Entrar en el Top 16, con este juego interior, ya es bastante objetivo.

Ivanovic: «Fuimos víctimas de la presión»

Dusko Ivanovic se mostró apesadumbrado tras perder un partido que tuvieron en sus manos. «Sabíamos el tipo de ambiente que nos esperaba en Belgrado, pero mis jugadores fueron víctimas de la presión. No fuimos capaces de manejarnos ante su principal arma, su rebote ofensivo. Además, encajamos demasiados puntos en la pintura».

De cara a las posibilidades de clasificarse para el Top-16, como ha venido diciendo desde la primera jornada, Ivanovic señaló que «dije que esta primera fase iba a estar muy igualada y no me sorprendería que terminara decidiendo el average». GARA

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo