El lehendakari, Patxi López, confirmó ayer que BBK y Caja Vital han empezado a hablar sobre una «fusión fría» entre ambas entidades. López aseguró que su Gobierno respaldará todas las operaciones «bien hechas» de las cajas vascas. El lehendakari considera bueno que se busquen alianzas «que permitan mejorar y aumentar su peso y fortaleza en el mercado financiero, donde el tamaño importa». Aun así, matizó que esta posibilidad se encuentra en un momento «muy incipiente y posiblemente se esté en conversaciones previas».

Además pidió que los responsables de las cajas puedan trabajar «con la prudencia y discreción» que necesitan. Precisó que esto no supone «secretismo» porque, si se alcanza algún acuerdo, debe ser ratificado por los órganos correspondientes y, por tanto, «se harán con total transparencia«.

De esta forma, confirmó la información publicada por «El Correo Español», en la que se asegura que la entidad vizcaina, bajo presión del Banco de España, ha sido la que ha planteado esta fórmula, de la que queda excluida la guipuzcoana Kutxa.

BBK afirmó que por el momento «no hay ninguna operación encima de la mesa», aunque matizó que la caja vizcaina «ha hablado, habla y hablará con todas las entidades».

Caja Vital admitió que, en los últimos meses, se han producido diversos escenarios de reflexión conjunta con otros gestores de cajas de ahorros y exploración de planteamientos futuros y análisis de diversas alternativas de alianzas, sin que haya una postura definitiva adoptada porque se está en «fase de conversaciones». Aunque la caja no citó en ningún momento a BBK, señaló que no puede mantenerse «al margen de la realidad del mercado financiero» y busca alternativas que «posibiliten la mejora de su posicionamiento estratégico». Los responsables de Kutxa fueron rotundos al afirmar a Europa Press que «nosotros no estamos en ninguna operación de ese tipo». La última posibilidad de una integración de este tipo fue planteada en mayo por el entonces presidente de la Caja Vital, Gregorio Rojo.

Fue rechazada por el presidente de BBK, Mario Fernández, quien sostuvo que no iniciaría «ninguna operación de fusión, bajo cualquier tipo de modalidad» con Kutxa y Vital, al continuar «las mismas circunstancias que hicieron fracasar los dos intentos anteriores, en referencia a las discrepancias políticas que ya habían hecho fracasar varios intentos entre las tres entidades o «a dos», con la caja guipuzcoana..

Pendientes de las condiciones

Por el contrario, BBK dirigió su objetivo a crecer, pero lo hizo adquiriendo una de las cajas con menor solvencia, CajaSur, y en un territorio que había descartado. El 1 de enero culminará el proceso de adquisición de la entidad cordobesa, intervenida por el FROB y cuyos números rojos, en agosto, alcanzaban los 852,2 millones de euros.

El alcalde de Gasteiz y consejero de Caja Vital, Patxi Lazcoz, negó que se esté cerrando una posible «fusión fría» entre la Vital Kutxa y BBK, y afirmo que «lo más importante no es el qué, sino el cómo» y las condiciones en las que se lleva a cabo.

El secretario general del PSE alavés, Txarli Prieto, estimó que se trata de una oportunidad y pidió que se haga «con la menor controversia posible». El PP de Araba fue más claro y explicó que está «a la espera de conocer las condiciones concretas en las que se sustanciaría la operación para fijar una posición al respecto», como el peso de cada una de las entidades, el control sobre la obra social o los criterios de actividad financiera.