liga acb : Los hombres de negro se imponen en el precioso derbi de Miribilla
Un baloncesto de miles de quilates
Bizkaia Bilbao Basket derrotó al Caja Laboral Baskonia en un duelo intenso y de enorme calidad ofensiva. El choque se decidió en el tercer período, cuando los locales, comandados por Aaron Jackson y con Mumbrú y Banic a gran nivel, lograron un parcial de 24-14.
Arnaitz GORRITI I
Si la calidad de los partidos se tasara con quilates, el derbi de ayer en Miribilla tendría miles. Es cierto que se echó de menos mayor dureza en defensa y que, por ejemplo, los hombres de negro no anduvieron finos en los lanzamientos de tres, o que los baskonistas se dejaron arrebatar hasta 17 rebotes ofensivos, pero la combinación de calidad e intensidad de las acciones sobre el parqué, sumado al ambiente de las gradas, dejó como resultado una delicia para los sentidos y un homenaje al baloncesto.
Fue el conjunto local quien se llevó el gato al agua de tan bonito choque. Con el trío Jackson -26 puntos-, Banic -20 puntos y 5 rebotes- y Mumbrú -14 puntos, 9 rebotes, 4 asistencias y 3 robos-, más la reaparición de un Warren acertado en la recta final -ayer el «desterrado» fue Javi Rodríguez-, los de Katsikaris se llevaron un duelo que no tuvo desperdicio ni respiro.
Tampoco los de Ivanovic le anduvieron a la zaga. Luciendo una aparatosa rodillera, Barac jugó al final, y mientras no tuvo el lastre de las faltas el croata impuso su ley. No obstante, los principales jugadores baskonistas fueron San Emeterio -16 puntos, 5 rebotes y 6 asistencias-, Huertas -19 tantos y 9 asistencias- y Haislip -22 puntos y 4 rebotes-, y hombres como Oleson o Logan también aportaron en ataque.
Un parcial demoledor
Los gasteiztarras arrancaban mejor, adelantándose 5-13. Pero a través de los rebotes en ataque -los de Katsikaris anotaron no menos de cuatro palmeos-, los hombres de negro igualaron una contienda con aires de bombardeo: 27-29 al final del primer acto y 52-48 al descanso, después de que los vizcainos superaran un adverso 28-37.
Pero el choque lo rompió el tercer parcial, 24-14, insuperable parta los gasteiztarras. Las faltas hacían mella en el juego interior baskonista -y Teletovic tuvo un día horrible- y su defensa hacía aguas ante los unos contra uno de los de Katsikaris.
Los de Ivanovic respondieron al fuego con fuego, jugando con San Emeterio y Bjelica de falsos ala-pívots y con Logan y Huertas juntos. Los locales, de la mano de Warren, seguían anotando, de modo que atenuaban la remontada alavesa, que llegó a ponerse 98-95. Pero ya era tarde.
Tanto Miribilla como Bilbao Basket necesitaban una victoria como ésa y el derbi merecía ser de semejante calidad.
No sólo los entrenadores tenían cosas que decir tras el derbi de ayer. Los bilbainos gozaban con las mieles de un triunfo dulce como pocos, mientras que los baskonistas rumiaban su derrota y trataban de buscar los errores cometidos para corregirlos y tener mejor suerte la próxima vez.
En este sentido, Fotis Katsikaris subrayó la «actitud» de sus hombres, más allá de reconocer que «la defensa puede ser mejor, aunque hoy -por ayer- no me importa».
«Mis jugadores han hecho un partidazo. Esperábamos un derbi cerrado, donde se impusiera la defensa, pero hemos ganado de forma muy bonita. Asimismo, también quiero felicitar a la afición, que si sigue así no tendremos ningún problema».
«El equipo ha luchado los 40 minutos, haciendo un muy buen trabajo en el rebote, y todo lo que hemos planificado ha salido en la pista. Por eso estoy muy feliz», añadió.
«Se ha notado mucho la actitud del equipo. Estábamos abajo al principio, con problemas, pero hemos seguido, y seguido... sin bajar los brazos ni la cabeza, y ahí ha estado la clave. Ahora tenemos que hacerlo cada vez. Restan seis jornadas de primera vuelta, creo que podemos», dijo.
Entre los jugadores, uno de los más felices era Marko Banic. El «pollo» ya mostró un estado de excitación muy elevado sobre el parqué, y por eso estaba tan contento. El de Zadar reconoció que «las últimas derrotas habían mermado nuestra confianza, y necésitábamos esta victoria». Según su opinión, el principal factor estuvo en «jugar como equipo. Ganamos gracias a eso. Cuando no jugamos como equipo, no podemos vencer a nadie».
Otro de los protagonistas, Alex Mumbrú, reconocía que «éste es el camino a seguir. Ha sido una victoria importante, porque necesitábamos un buen partido tras una mala racha. Después de escaparnos en el tercer cuarto se han acercado mucho, pero era difícil remontarnos».
Sombrío y lacónico, Ivanovic era la cruz de la moneda. El montenegrino se quejó del déficit en el rebote y la defensa. «Para ganar fuera, hay que defender y cerrar el rebote. Ellos han entrado en el partido por el rebote y nuestra defensa fue muy blanda. Al final mejoramos un poquito, pero no fue suficiente», resumió. A. G.
Sigue de colista, pero el Alicante de Txus Vidorreta pudo respirar un poco tras derrotar por 80-72 al Unicaja. El equipo del técnico de Indautxu se basó en la sorprendente actuación del base valenciano Llompart, autor de 17 puntos, y de los recién llegados Rancik y Hasbrouck, con 14 cada uno.
Los equipos de la parte baja apretaron las clavijas; así se entienden el triunfo de Manresa ante Fuenlabrada por 66-54 y el de Granada en Badalona por 67-74, con 16 puntos y 10 rebotes de Robert Kurz. Pero lo que llama la atención de este duelo fue el debut en las filas del DKV Joventut, con 16 años, 6 meses y 9 días, del base Albert Homs, que jugó 14 segundos.
Sin opción a dar la sorpresa, el CAI Zaragoza caía por 84-65 en la cancha del Real Madrid -líder en solitario- y un Menorca que puso en apuros al Valencia Basket, pero que cayó por 70-63 ante el empuje de Claver, Rafa Martinez y Savanovic.
Por otro lado, la pelea por entrar en puestos de Copa sigue encarnizada. Hasta seis equipos están empatados a seis victorias, tras los tropiezos de Gran Canaria, Unicaja, Valladolid -55-65 ante el Barcelona- y Fuenlabrada. Y ojo con Valencia y Cajasol; este último superó al Estudiantes el sábado por 73-77, que ya suman cinco.
El MVP de la jornada fue para Paul Davis de Cajasol, con 25 puntos, 11 rebotes y 33 de valoración.
